De España se decía que era tan piadosa como pecadora y tan triunfante como declive. Hoy, se encamina hacia el derrumbe por un Gobierno de coalición progresista donde cada uno tira por su lado. También es  la única gran economía del euro según todos los indicadores que durante el mes de febrero siguió destruyendo empleo. La de los enchufados en la parte no productiva a cuenta del Estado. La de los chiringuitos, pues dicen que hay un organismo público por cada 2.300 habitantes. La de las leyes que se retuercen a conveniencia. La que siente repelús de los demás, exceptuando el entorno de asociados y  partidarios. 
En esta España sumida en la adversidad de chaqueteros y utilitarios, para el Gobierno solo cuenta Cataluña y sus extremistas. Al vicepresidente, no se le conoce más esfuerzo ni entusiasmo que el que realiza dando y recibiendo apoyos en un toma y daca vergonzoso. Tratan de desviar empresas, ej.: el litio extremeño quieren transformarlo en Cataluña. Todo para Cataluña. 
El ciclón político que recorre este país aterra. Solo se mueven por interés propio. Hay altos cargos que en su vida han trabajado o, a lo sumo un año o dos, que toman la política como profesión de por vida  labrando su porvenir a base de conflictos  sin importarles angustias ni dificultades por las que pasa el pueblo que paga rondas de elevado coste. Se blanquean pactos, no hay límites, justifican lo injustificable, la convivencia es nefasta, provocan bronca con discursos fanáticos, el portavoz de ERC, que está en las antípodas como  accionista favorecido, amenaza y no respeta nada ni a nadie, etc.    
Y si el rey hace defensa de la unidad de España, es su obligación, y la de ellos, respetar. Si a ERC y cía. no les representa, no quieren su tutela ¿acaso creen que ellos representan a cuarenta millones de españoles? ¿Qué pintan estos en el Congreso? Por cierto, si estos y otros no acuden a las sesiones solemnes y otras ¿se les descuenta de su abultada nómina? Si no respetan las instituciones del Estado, no aceptan sus reglas, deberían ausentarse para siempre de las Cortes que les acogen y pagan espléndidamente. Ya basta de trifulcas, extremismos…