José María Nieto Vigil

Sin Perdón

José María Nieto Vigil


Otoño

30/09/2022

Les confieso con toda sinceridad, sin reparo alguno y disimulo de ninguna naturaleza, que la estación de otoño es la que disfruto con más intensidad y profunda emoción. Soy un sentimental, qué le voy a hacer. Siempre ha sido así.
Vencido el verano, olvidadas aquellas feraces jornadas de descanso estival, demasiado exigentes en sequedad y calor africano, se da la bienvenida al equinoccio de otoño, tan tranquilo y sosegado, tan apacible como atemperado. Frente a la rotundidad y el extremismo estacional de los áridos meses de verano, se abre paso la moderación, la templanza y la sobriedad impuesta por el equilibrio entre las noches y los días.  
Qué hermoso espectáculo se abre ante nuestros ojos, ante nuestra sorprendida mirada, cuando asistimos a la transformación de nuestros paisajes, pasando del verde radiante y estridente, a la gama de ocres y amarillos que salpican nuestros campos y bosques, nuestros parques y jardines. No me negaran que no es un deleite para nuestros sentidos, para cualquiera de ellos.
Superados los momentos de extroversión de julio y agosto, de manera lenta y gradual, llega el sosiego de los meses de octubre y noviembre, más introvertidos y recogidos. Es el tiempo de honrar a nuestras cosechas, cada vez más maltratadas y agostadas, es la época del amable paseo y de la gratificante siesta, de la recogida de setas y piñas, de la brama del ciervo en celo, de la excursión de fin de semana y la sobremesa cálida y amena. En definitiva, vivencias de regocijo y encuentro con la naturaleza,  momentos de reunión, amable conversación y agradable lectura. Una atmósfera cargada de intimismo impregna nuestras reuniones nocturnas al abrigo del fuego de la chimenea. 
Palencia nos ofrece muchas y diversas posibilidades otoñales. No me negarán que no sea hermosa la metamorfosis de nuestras zonas verdes, que no sea agradable recorrer las orillas de nuestro río y las veredas improvisadas de nuestros parques, cuajadas de crujiente hojarasca que cubre el suelo a modo de alfombra. 
El otoño ha llegado. Disfrutémoslo y saboreémoslo. 

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