El tiempo ensombrece el acto del indulto

César Ceinos
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La procesión fue suspendida por temor a que lloviera en el trayecto y la alternativa de salvar una parte del desfile tampoco se celebró al confirmarse las malas previsiones meteorológicas en la mañana de ayer

La programación de la hermandad del Cristo de la Misericordia se redujo al interior de La Compañía. - Foto: Óscar Navarro

La hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia se volvió a quedar ayer, de nuevo, en la iglesia de La Compañía por culpa de la meteorología, como ya ocurriera el Miércoles Santo por la tarde, cuando el VíaCrucis tuvo que desarrollarse en el interior del templo. La procesión del Perdón e Indulto fue suspendida antes de la hora de inicio por temor a que la lluvia que se anunciaba dañara alguna de sus tallas, en especial la imagen titular del Santísimo Cristo de la Misericordia (Juan de Valmaseda, s. XVI). 

Por si el tiempo lo permitía, los cofrades tenían un planB, que consistía en desarrollar el acto central del perdón e indulto al preso en La Compañía y, posteriormente, salir en procesión con el paso de Nuestra Señora del Perdón y San JuanEvangelista hasta la iglesia de San Miguel. Por último, también habían pensado hacer una despedida de las tallas en la plaza de Isabel la Católica. Pero las previsiones meteorológicas acertaron y la programación tuvo que limitarse al interior del edificio. 

La lluvia empezó a hacer acto de presencia cuando los hermanos de la Cofradía de Jesús Crucificado trasladaban desde su sede, SanFrancisco, hasta la iglesia de la patrona de la ciudad la talla de Nuestro PadreJesús Crucificado (Alejo de Vahía, siglo XV), que también iba a participar en el desfile que se suspendió. Con esta escultura dentro del templo de la patrona, arrancó la celebración, que contó con el acompañamiento musical de las bandas del Santísimo Cristo de laMisericordia y de San Nicolás de Pollos (Valladolid) y con la presencia de un grupo de antiguos caballeros legionarios procedentes de la capital vallisoletana, que escoltaron la imagen de Valmaseda.

Ante esta situación, el preso voluntario que está cumpliendo el tercer grado penitenciario en la cárcel de Dueñas (el Gobierno central no concedió el indulto solicitado por la hermandad) fue perdonado junto al altar. Quedó, por tanto, muy deslucido este acto, que estaba previsto que se desarrollara en la plaza Mayor, al igual que la conmemoración del sesquicentenario del desagravio al SantísimoCristo. Los culpables fueron los elementos.