Dionisio Lamas Muñoz

Tribunal Libre

Dionisio Lamas Muñoz


Políticas perversas

24/10/2022

Son las que aplican los gobiernos que intentan justificar el mayor bienestar social para el pueblo, con el fin de permanecer sin ofrecer soluciones a las demandas urgentes, sobre las múltiples carencias vitales de la nación, pero se produce el efecto contrario, es decir, aumenta en gran medida el hambre y la pobreza del pueblo, que acude a los centros de beneficencia, donde se desborda la demanda de alimentos, cuya consecuencia es comedores sociales sin capacidad, o bancos de alimentos vacíos.
Tales políticas ofrecen a la sociedad cifras exponenciales de desempleo, siendo los gobiernos incapaces de presentar resultados satisfactorios con el propósito de resolver, tan gran desacierto en la gobernanza de un país.
Son esas políticas que se amparan en la democracia y la grandeza de su libertad, regulada esta y moderada a través de las leyes y normas, con el objeto de conseguir una convivencia cívica entre las gentes, pero permite el desorden social, el incumplimientos de las leyes, y crea normas desajustadas al derecho, impropias de las democracias y afines a las doctrinas ideológicas de contenido fanático e intransigente, cuyas secuencias revierten de forma adversa en la  educación, la justicia, y la cultura de la nación. Dicen proteger la historia y las tradiciones, pero mutilan o recortan su contenido, confinando al oscurantismo cualquier atisbo que engrandezca y realce el inmenso patrimonio histórico-cultural que se posee, y es seña de identidad de un pueblo y fortaleza inexpugnable del ser de una nación.
Políticas perversas son las que no invierten en la conservación de su herencia, gloria de un pasado que permanece en los siglos para orgullo de las generaciones venideras. Son las que no invierten en investigación, porque sus pretensiones son conseguir un país de perfil bajo, donde la educación sea un mero trámite y no el medio de lograr una nación culta, y próspera. Son las que fomentan la incultura, en todos sus términos, ofreciendo títulos sin los conocimientos requeridos, la holgazanería a través de la subvención, y a su vez decrecen las becas de estudio pero aumentan sin control los ilustradores, los parados, los mendigos, y se prodiga la delincuencia en cualquier orden.

ARCHIVADO EN: Pobreza, Democracia, Leyes