Juanma Terceño

El hecho gastronómico

Juanma Terceño


La paella del café

16/06/2021

El pasado fin de semana pude probar uno de esos platos cuyo nacimiento es anecdótico y el paso del tiempo les da fama y misticismo. Algunos son iconos o grandes clásicos de la gastronomía universal y otros son más modestos, cuya fama se queda en un entorno regional, provincial, local o incluso familiar; seguro que en todas las familias tenemos ese determinado plato que «en mi casa se hace así», o entre nuestros amigos nos hacemos comentarios del tipo «¿y no le pones esto? Pues mi tía siempre se lo pone y le da un punto buenísimo, pruébalo».
En este caso, el hecho sucedió en Altea, en el Hotel Restaurante San Miguel, en pleno Paseo Marítimo. Aquí venía a menudo hace unos 20 años el dueño del café situado en frente, a pedir que le llevaran para comer una paella de verduras pero que tuviera también garbanzos y gambas. Así que en cocina ya se quedaron con la comanda de “paella del café”, y con eso sabían automáticamente cuáles eran los ingredientes que debían añadir.
Con el paso de los años, la fama de esta paella fue creciendo y, aún hoy en día, y sin tenerla puesta en la carta, aquí acuden con frecuencia comensales de Altea y otras localidades de La Marina o incluso de Alicante, a pedirla y degustarla.
Lo cierto es que está muy buena; unos pocos garbanzos y algunas gambitas pequeñas peladas, se suman al festival verde de espinacas, brécol, coliflor, judías verdes, garrofons, pimiento… hay sabor, hay jugosidad y mucho cariño puesto en este plato.
Pep, el propietario, nos contaba esta anécdota con el cariño y la ilusión de haber conseguido un objetivo marketiniano de la manera más sencilla o casual y, por supuesto, sin haber invertido dinero alguno en ello, hecho que también cuenta a su favor. Casi ya como remate de la jugada, Pep también en muy recientes fechas se considera ‘padrino’ de una receta de pizza calzone de la pizzería vecina, ya que a él le gusta la calzone con huevo frito en su interior, y ya le han chivado que hay clientes pidiendo la ‘pizza del Pep’ en este local.
¡Miedo me da este Pep con un móvil y una cuenta de Instagram, tiene Altea un gastroinfluencer en potencia y no se ha dado cuenta! Por mi parte, decirles que si están por la zona, pueden ir a probar la paella del café, merece la pena.