Toyi Marcos Sosa

Desde mi ventana

Toyi Marcos Sosa


Mi Lucera, Lucerita

28/05/2023

 En el coquetón Teatro Principal se levantaba el telón los pasados días 22/23 por concesión del Ayuntamiento a las Aulas de Mayores de La Puebla y San Juanillo. No soy ninguna crítica teatral; solo quiero expresar el disfrute sobre algo que ya había olvidado. Nada más entrar en el vestíbulo con Pilar Amor,  las amabilísimas azafatas que me pareció estaban al cargo de Adela se ocuparon de nosotros: Lydia, se encargó de llevarnos hasta el lugar adecuado e Inés, de devolvernos de nuevo al vestíbulo. Me sorprendió tanto que allí hubiera un lugar para una silla de ruedas que llegué a experimentar un agradecimiento emocional hacia la Concejalía de Servicios Sociales;  pues es un mucho que ayuda a tener una vida con un mayor bienestar al tiempo que una gran satisfacción personal. 
Asistíamos al estreno teatral de Mi Lucera, Lucerita, cuyo texto y dirección corrían por cuenta de Concha Santiago. Asistentes: Escuela Teatro UPP. Ayudante de dirección Silvia Gutiérrez. Llama la atención el gran elenco en el reparto a cargo de los alumnos del grupo teatral de las Aulas de Mayores de La Puebla y San Juanillo. Nada menos que 18 personajes conformaban la obra. Si para los profesionales hacer teatro es complejo por la gran coordinación de actividad física y mental que exige,  admiremos a los aficionados intérpretes palentinos: Maruja Fernández, Juanita Fernández, Jesús Castro, Mari González, Carmen González, Aurori Alonso, Reyes Ortego, Santos Gómez, Ángel Muñoz, Mayte Gallego, Piedad Martín, Emma Lucio, Aurora Calleja, Jesusa Antolín, Pilar Sanz, Domi Gutiérrez, Miguel Ángel Cetrangolo y Luis Fernández. Sabemos que el director, en este caso directora, es la que tiene el control absoluto de todo lo que se va a desarrollar en el escenario; algo muy difícil que solo una buena profesional sabe capear. Buen trabajo. Si hubo algún lapsus, no nos enteramos. Los diálogos largos requieren de buena memoria, y en los cortos, la entonación es primordial. Así, la vocalización, entonación, dirigirse unos a otros por el nombre asignado en la obra, el movimiento a través de la memorización… todo salió perfecto. ¡Enhorabuena!