Paco García, entrenador del Valladolid, no restaba mérito alguno al Zunder. «Hemos perdido ante un excelente Palencia, al que le hemos plantado cara en lo que hemos podido en la primera parte. Hablamos durante la semana de parar ese tercer cuarto en el que Palencia mete esa quinta marcha en intensidad, en velocidad y acierto. Hoy (por ayer) lo ha vuelto a hacer. Y poco más. Han sido muy, muy superiores en la segunda parte. Nada más que desearles suerte para la final.Han hecho una temporada excepcional, siendo segundos en la liga por méritos propios, siendo el mejor equipo como local, el único que plantó cara al Andorra y le ganó la Copa.Para nosotros es una lección más. Un paso para el club meternos en una final-four. Darnos cuenta de las limitaciones cuando nos medimos a grandes equipos de la liga. Hemos intentado cosas, pero Palencia ha estado tremendamente acertado y no puedo reprochar nada a mi equipo».
PEDRO RIVERO
El técnico segoviano mantiene una gran relación con Paco García. De hecho, dirigió al entrenador del Zunder en la selección promesa hace 21 años en un torneo internacional en Japón. Fiel a su estilo, no quiso lanzar las campanas al vuelo, pese al partidazo.
«Estamos tremendamente contentos. Es increíble el trabajo durante toda la temporada, pero hoy (por ayer) en el día que tiene que pasar, sale nuestra mejor versión, la más competitiva. No es solamente que hayan jugado bien, sino la química que tienen ellos hace posible que sucedan estas cosas», señaló.
Rivero consideraba clave anular a Pantzar y Torres y el objetivo se consiguió. «Se ha hecho un trabajo de mucho mérito.Llevábamos mucho tiempo pensándolo cómo hacerlo y se ha logrado con muchos jugadores distintos. Si no defendíamos entre todos iba a ser complicado.Encima, ofensivamente hemos estado muy bien».
Rivero frena la euforia. «No hemos hecho nada. Hemos ganado la semifinal, ahora a descansar, ver la segunda semifinal, disfrutar de ella, coger las cosas que hay que coger. No hay nada hecho porque no hay nada hecho, pero es increíble lo que se ha hecho. Y ahora la final hay que vivirla, con todas las emociones que conlleva, las buenas, las malas. No sabemos por dónde irá. Hemos estado el 95% de la liga peleando por todo y por qué no ahora».
Tuvo palabras de elogio para la afición. «Estábamos como en casa. En la final, aunque seamos minoría, seguro que se nos va a escuchar bien».
Manu Rodríguez fue uno de los destacados. «Las sensaciones han sido buenísimas, el público ha disfrutado. Hemos sabido mantener la intensidad. Para la final hay que tener la cabeza fría».