«Estamos trabajando con las ganas y las ideas que teníamos»

Noelia Tadeo
-

Mariano Martínez, alcalde de Monzón de Campos, invita a la diversión ante la llegada de las fiestas patronales, mientras continúa con su labor al frente del Consistorio

«Estamos trabajando con las ganas y las ideas que teníamos» - Foto: Óscar Navarro

Monzón de Campos se prepara para vivir las fiestas del Salvador y Mariano Martínez, el alcalde, considera que todos los vecinos encontrarán una actividad con la que disfrutar y olvidar por unos momentos el devenir cotidiano. 

¿Cómo se presentan las fiestas del Salvador de este año?

Son unas fiestas más del Salvador. Como cada agosto, todo está organizado y tienen muy buena pinta porque hay gente del pueblo, ya están aquí aquellos que nos visitan en estos días. Hay buen ambiente y tenemos ganas de que comiencen. 

Desde su punto de vista, ¿qué atractivo tienen?

La idea es hacer un programa variado para que todo el mundo se vea reconocido en las fiestas, desde aquellos más mayores, que apuestan más por las actuaciones de calle o las verbenas, a los más jóvenes, que tienen los cuentacuentos en la zona de la piscina, las charangas, las yincanas… Son muy variadas para que todos puedan disfrutar de una actividad. 

¿Personalmente qué acto no se pierde jamás?

A mí me gustan las verbenas porque es una forma de ver a todo el pueblo junto. Agrupan a todos los vecinos, sin excepción, a aquellos que les gusta bailar y a quienes les gusta ver el espectáculo porque ahora son más grandes y no dejan de tener un atractivo visual. Me quedo con esto porque es la parte que reúne a un público más variado. 

¿Qué novedades presenta el programa festivo?

Siempre hacemos alguna cosilla distinta para sorprender a los vecinos. Una cosa que es curiosa y no deja de ser más cultural es la presentación de una novela de un chico que desciende de Monzón. 

Nacho Rodríguez ha publicado recientemente Tránsito, su primera novela, y vamos a introducir su presentación en estas fiestas. Será un evento pensado para la literatura. Le vamos a dar la oportunidad de presentar esa novela y, así, la gente del pueblo va a tener ocasión de ver a un paisano que está publicando su primer libro. 

Dejando a un lado los festejos, ¿cuál es la mayor alegría que le aporta ser alcalde?

Ya llevo muchos años, pero cuando entras de alcalde tienes momentos para todo. Momentos de mucha pena cuando sucede alguna desgracia, pero también satisfacciones, ver cómo crece el pueblo, cómo se van mejorando los servicios...

Una gran satisfacción que me da la Alcaldía es cuando se empadrona alguien, cuando tienen ganas de venir a nuestro pueblo y se empadronan en una de las viviendas. 

Aunque son pequeñas cosas nos hacen felices. El saber que nuestro trabajo se ve de alguna forma reconocido por la presencia de personas que quieren establecerse en nuestro pueblo es un orgullo, sobre todo con la despoblación que tenemos en esta zona, pues los fallecimientos superan a los nacimientos.

¿Cómo está transcurriendo el verano en Monzón? 

Es un verano distinto al haber sido un año electoral. Hasta que tomamos posesión y arrancamos nuevamente es diferente. Aunque nos pillaba gobernando a nosotros y no hemos cambiado demasiadas cosas, sí que te cambia un poco la mentalidad porque trabajas con proyectos que tienes abiertos y vuelves a iniciarlos al haber sido reelegido. Es una forma de iniciar otra vez la actividad y de seguir apostando por aquellos proyectos que habíamos dejado en impasse para ver dónde nos ponían los vecinos. Ya estamos trabajando con las ganas y las ideas que teníamos antes de las elecciones. 

¿En qué proyectos se trabaja desde el Ayuntamiento?

Ahora tenemos entre manos varios, ya que las convocatorias de los fondos europeos están abiertas. Llevamos a cabo un proyecto de eficiencia energética y otro de instalaciones deportivas. 

También queremos desarrollar un proyecto muy bonito. Para este hemos pedido la cesión de la casa del antiguo guarda del canal de Palencia. Se trata de una vivienda muy singular, deshabitada al menos  desde hace treinta años. Queremos hacer un alojamiento rural distinto a lo que hay hasta ahora. La casa se presta, por su arquitectura y el misterio que la rodea, a realizar algo diferente. Cuando nos den la cesión convocaremos un concurso de ideas donde veamos el uso atractivo que le podemos dar. Lo que queremos es que no sea un alojamiento más, sino que tenga una parte excepcional y la gente vea algo novedoso. 

Un último mensaje

Que tenemos todo a favor. Nos tenemos que divertir porque ya vendrán el otoño, las clases y los trabajos, pero ahora nos vamos a centrar en las fiestas.