Froilán de Lózar

La madeja

Froilán de Lózar


Pozo del Ves

28/07/2023

He llegado al Curavacas desde casi todos los puntos. Por Resoba, cuando Marta Redondo llevaba la corresponsalía de Diario Palentino en Aguilar; por Polentinos, hasta tocar las escaleras, pasando noche en uno de los chozos; desde Cardaño, en otoño del pasado año, guiados por Shaila Pereira, la rutera de mi blog; varias veces por Lores, varias por Casavegas para encontrarnos en el camino con el Bocarón del Cerraíllo, también conocido como Bocarón de Casavegas, Ojo de Casavegas o de Caloca, si bien el primer término es el que citan y prefieren los habitantes del pueblo; también por Vidrieros e, incluso, en varias ocasiones, hemos superado nuestro puerto y hemos llegado a Potes siguiendo una de las pistas, al borde de un enorme precipicio. A veces tienes la impresión de que lo conoces todo, hasta que llegas a otro punto que te sorprende tanto o más que todo lo visto anteriormente. Viví una sensación similar el pasado año en Soria, al visitar La Laguna Negra y ya expuse aquí mi comparación al respecto de nuestro Pozo Curavacas con aquella laguna soriana, a la que sólo le falta la atención de las autoridades cuando nieva, porque el resto ya lo tiene abierto y visitable, con carretera y aparcamiento que te deja a dos o tres kilómetros del fenómeno. Palencia tiene en su montaña una riqueza que se hace difícil de describir si quienes me leen por costumbre o por descuido no lo han experimentado. El mismo día que el Sevilla jugaba la Europa League en el Puskás Arena de Budapest me alié con Estalayo para visitar las lagunas y el Pozo del Ves, circo formado por la Curruquilla y el Pico de la Hoya Continua, sin duda, como algunos calificaron, uno de los más bellos y recónditos parajes de la Montaña Palentina. Aunque algunos ruteros apuntan en wikiloc el punto de inicio y final en Cardaño de Arriba, nosotros lo hicimos desde Pineda. Si eliges la suya, debes llegar hasta este pueblo de Fuentes Carrionas y tomar la Senda del Pozo de las Lomas, hasta la Majada de las Vacas.
En esta ocasión, subimos por Lebanza, la Abadía, hasta asomarnos a Linares, el puerto de Polentinos, para bajar al Valle de Pineda, siguiendo el curso del Carrión. Cascadas, fauna y naturaleza a raudales.