Quinta derrota consecutiva para el Becerril, que pese a jugar un buen partido en su visita al Burgos Promesas no pudo cortar una mala racha que por momentos pareció que encontraría fin. Decidió el destino de los tres puntos una desafortunada jugada que no parecía llevar mucho peligro, pero que ni la defensa ni el portero palentinos acertaron a despejar y Lucio aprovechó para marcar el único tanto de la tarde. 

Superados los minutos iniciales de tanteo, fue el Burgos Promesas el primero en hacerse con el mando del juego, aunque con un dominio tímido al que el Becerril no tuvo dificultades para hacer frente desde el orden defensivo. Un disparo desviado de Víctor fue el único intento de los locales de llevar peligro al marco de Sevi hasta el minuto 20. El cancerbero palentino estuvo acertado en un par de intervenciones de mérito. Tras haber sobrevivido a los mejores minutos del Burgos Promesas, el Becerril consiguió volver a igualar el partido en el centro del campo para vivir una recta final de la primera mitad sin sobresaltos, ni apuros en defensa.

El paso por los vestuarios no cambió el guion del partido, en la que los locales siguieron llevando la iniciativa pero sin lograr el desborde de un Becerril muy ordenado en todas sus líneas.

En el 78´, el central burgalés Lucio volvió a sumarse al ataque de su equipo para, esta vez, decidir el duelo, en el único error defensivo morado de todo el partido.

Verse por debajo en el marcador de manera inmerecida decidió por fin al Becerril a ser algo más ambicioso y tratar de subir líneas en busca del empate. Sin embargo, a los de Francis Olea les faltó clarividencia en la creación y acierto en los últimos metros para lograr su propósito.Los locales pudieron sentenciar en algunas contras.  Sevi mantuvo a su equipo con esperanzas hasta el final, pero el exiguo 1-0 terminó siendo definitivo y la reversión de la mala racha del Becerril deberá esperar a mejor ocasión. Mejora notable, en relación a partidos pasados, pero la victoria se resiste desde la primera jornada.