Combatir la disminución de la actividad económica consecuencia tanto del cambio de hábitos de compra de los consumidores como del envejecimiento de la población. Ese es el objetivo con el que el Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Impuslo Económico, ha presentado a la segunda convocatoria de la iniciativa Acciones Innovadoras vinculada a la Iniciativa Urbana Europea un ambicioso proyecto valorado en 6.250.000 euros. 

La esperanza del área que preside Judith Castro es conseguir financiación -hasta cinco millones de euros- para desarrollar una actuación global que dé respuesta a la crisis comercial que padece la ciudad, la cual ha sido plasmada en un proyecto contratado a la empresa Nettium el pasado mes de julio por 18.029 euros. 

Por ahora, el Ayuntamiento prefiere no dar detalles de en qué se gastarán esos 6,2 millones de euros, y tan solo ha ofrecido una pincelada general de esta propuesta en la Mesa de Comercio y Hostelería celebrada la semana pasada. 

Así, el equipo de Gobierno de Miriam Andrés quiere que este proyecto afronte el desafío antes citado «a través de la especialización inteligente y transformación de los modelos de negocio tradicionales asociados al sector minorista (retail)». 

Para lograrlo, el proyecto apuesta, de forma general, por dos acciones. La primera es «la creación de un ecosistema que ofrezca las condiciones óptimas para que las empresas tradicionales se abran al mundo, dejando de depender únicamente del consumo local». 

Y, en segundo lugar, se apuesta por «la atracción de talento, ofreciendo a las empresas emergentes (startups) europeas asociadas al sector minorista (retail) espacios donde establecerse y desde donde gestionar sus proyectos digitales». 

El importe global del proyecto presentado por el Ayuntamiento a los fondos Feder de la Unión Europea asciende a 6.250.000 euros, de los que 1,25 correrían a cargo de las arcas municipales. Eso sí, antes debe entrar en el programa, en el que se valora la innovación, el enfoque holístico, la participación ciudadana, la calidad y la transferibilidad, algo que no se sabrá hasta finales de febrero o principios de marzo del año que viene, según fuentes municipales.  

Si Palencia logra esta importante financiación, tendrá tres años y medio para desarrollar este ambicioso proyecto y, de esta forma, lograr una auténtica revolución en el comercio de la ciudad y en la forma que los palentinos tienen de relacionarse con él.