Un vecino de Palencia, de nacionalidad extranjera y monitor de una fundación, se enfrenta a una pena provisional solicitada por el fiscal de tres años de cárcel como presunto responsable de un delito de abusos sexuales sobre una mujer, de 53 años y discapacitada intelectual con un grado del 76%.
Según el escrito de acusación provisional al que ha tenido acceso Diario Palentino, los hechos ocurrieron entre primavera y verano de 2020, en plena pandemia incipiente del covid. El Ministerio Público sostiene que el acusado, tras acudir a un piso tutelado en Palencia por la fundación de la que era miembro, llevaba a su víctima a una de las dependencias y supuestamente la sometía a rozamientos con sus genitales.
Asimismo, el fiscal añade entre los hechos punibles de este caso que en una ocasión, cuando los residentes del piso tutelado habían salido al balcón para aplaudir a los sanitarios por su decidido combate contra la pandemia del coronavirus, el acusado supuestamente aprovechó la coyuntura para quitarle a la víctima la chaqueta con el objetivo de mirarle los pechos. Para el Ministerio Público, estas actuaciones son constitutivas de un delito de abusos sexuales y además de la pena de prisión pide para el procesado una indemnización por daños morales a favor de la víctima cuantificados en 5.000 euros, así como la prohibición de acercarse a ella.
EXHIBICIONISMO. Por otro lado, otro varón, también vecino de Palencia, se enfrenta a una pena de nueve meses de prisión al estar acusado de exhibicionismo ante una menor, a la que abordó en varias ocasiones. El fiscal sostiene que el acusado abordó a la joven, que se dirigía a su casa, cuando viajaba en su vehículo a las 21,30 horas del 12 de septiembre de 2022, a la altura del Camino de Collantes. Detuvo el vehículo ante la menor, con la ropa interior bajada, y le preguntó dónde se encontraba el hospital Río Carrión, que precisamente se encontraba a la vista. Sin embargo, la joven, tras llegar a su domicilio, se percató de la presencia del acusado, que la había seguido con el coche. Allí, le volvió a preguntar pero esta vez por otro centro sanitario. La Fiscalía relató que días después la chica se topó de nuevo con el acusado, que hacía deporte sin camiseta y esta vez tampoco no dudó en pedirle la suya.
Conocidos estos hechos, la madre de la menor acudió a la Comisaría de la Policía Nacional para presentar la correspondiente denuncia.