La modernización de los regadíos repercute finalmente en un incremento del rendimiento de los cultivos para los agricultores de Castilla y León, aunque también supone un crecimiento del gasto energético, ya que los nuevos equipamientos conllevan un elevado consumo de electricidad. Esto, sumado al aumento de más de un mil por ciento del gasto eléctrico desde el año 2008, ha llevado a los regantes a impulsar la compra conjunta de energía, una negociación que en la región realiza la Asociación de Comunidades de Regantes de la Cuenca del Duero (Ferduero).

Con el segundo año de esta iniciativa ya en marcha, los resultados de la primera experiencia no pueden ser más favorables. El presidente de Ferduero, Ángel García Quintanilla, calcula que las comunidades participantes en la plataforma de compras han ahorrado entre un diez y un once por ciento respecto a cuando lo hacían individualmente, lo que se traduce finalmente en unos 500.000 euros menos.

El segundo contrato, que abarca del 1 de abril de 2015 hasta el 31 de marzo de 2016 y que se adjudicó el pasado mes de diciembre a la empresa EDP Energías de Portugal e Hidrocantábrica, supondrá un ahorro mayor, según las previsiones de Ferduero, ya que los costes de gestión se han reducido un 25 por ciento respecto al anterior. En total, unos 600.000 euros que se repartirán entre las 30 comunidades de regantes que se benefician ya de la compra conjunta de electricidad. A esto se añadirán las deducciones fiscales para el riego que comenzarán a aplicarse este año tras las subidas desde 2008 por el denominado ‘tarifazo eléctrico’.

 

beneficios. La exoneración fiscal del impuesto eléctrico aprobada por el Gobierno central, que alcanza el 85 por ciento, permitirá a los regantes disminuir su factura en un 4,1 por ciento. Una medida, como matiza García Quintanilla, de la que se pueden beneficiar todos los usuarios «siempre que usen el agua para regar los cultivos».

A esta nueva fiscalidad, que según la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) supondrá un ahorro de 6,5 millones anuales en la Comunidad castellano y leonesa, se añade la rebaja del sistema de tributación por módulos, que permitirá aliviar de su declaración de la renta el sobrecoste energético que supone pagar todo el año por un servicio que únicamente utilizan durante la campaña de riego (de mayo a octubre).

«Vamos a recuperar a través de módulos la subida que suponía el ‘tarifazo’, el resto no», señala el presidente de la asociación castellano y leonesa, que añade que van a continuar «peleando» para reducir los costes fijos de la energía, «que se han disparado». García Quintanilla calcula que el 40 por ciento de lo que el agricultor paga se destina al coste específico y el resto a los fijos.

«La energía estacional se usa unos meses al año y otros no, pero nos obligan a adquirir la potencia máxima que consumimos en el mes que más gastamos. Eso supone que durante el tiempo que no estamos regando, también se pagana los costes fijos», destaca.

 

más comunidades. La compra conjunta de electricidad iniciada en 2014 por Ferduero contó desde el principio con 24 comunidades de regantes que suman 220.742,5 hectáreas, a las que se han añadido en el último contrato que entró en vigor el pasado 1 de abril otros cuatro colectivos, lo que supone superar las 224.000 hectáreas. Desde Ferduero, a la que pertenecen 224 comunidades de la región, aseguran que este tipo de sistema se destina a las que se han modernizado y en la plataforma hay representantes de todas las provincias.

La Asociación de Comunidades de Regantes de la Cuenca del Duero únicamente actúa de intermediario en la negociación, «ya que se ahorra más si se gestiona bien las instalaciones y los periodos de riego». En el nuevo contrato con la empresa EDP se ha aumentado la energía acordada alcanzando los 55 gigas de consumo.

Posteriormente, cada comunidad de regantes realiza contratos individuales, «uno por cada punto de suministro» y les facturan directamente a ellos. Ferduero ha optado por utilizar la fórmula «indexado pool», que supone darse de alta como comercializadora y comprar por ellos mismos en función de las peticiones de los regante del día anterior, ya que hay una serie de horas establecidas a lo largo de la jornada en las que se puede vender o comprar la energía.

La ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, recordó durante una visita a Valladolid que desde su departamento se fomentan las compras conjuntas de la electricidad entre los profesionales del regadío. Unos beneficios que constatan experiencias como las de Ferduero, con un ahorro estimado que supera el medio millón de euros en su primer año en funcionamiento.