Oria de Rueda: Las previsiones micológicas se están cumpliendo

César Ceinos
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La caída brusca de temperaturas y las lluvias de octubre provocan la proliferación de setas de cardo

Imagen de archivo de un hombre recogiendo setas de cardo en una zona cercana a Husillos. - Foto: Brágimo (ICAL)

Buenas noticias para los aficionados a las setas. Las grandes expectativas de la campaña micológica en tierras palentinas se están cumpliendo y, en estas fechas, proliferan las setas de cardo, los champiñones y otras especies comestibles que tradicionalmente se recogen en otoño en la mitad sur de la provincia.

Así lo explica el director de laCátedra de Micología del campus universitario de La Yutera, JuanAndrés Oria de Rueda, quien comenta que la caída brusca de temperaturas y las lluvias persistentes de la segunda quincena de octubre están favoreciendo el crecimiento de estos hongos.Especialmente se detiene en las setas de cardo,  que salieron «en las cañadas por donde se produce o se produjo en el pasado el tránsito de algún tipo de ganado extensivo». «En el lugar donde salen, ya pueden ir 60 coches todos los días que siguen brotando. Pero en el sitio donde no hay cardo corredor, que es el que está ligado a la ganadería extensiva, están saliendo y la gente se está llevando varios kilos», declara Oria de Rueda. «Se ha producido un brote fuerte de esta especie, la estrella y la preferida para muchos», añade. Su previsión es que durante los próximos días, de seguir las mismas circunstancias, continúen creciendo.

Más allá de las setas de cardo, en las zonas de pinares, el director de la Cátedra comenta que también «están empezando a salir los níscalos y algunos boletus, aunque aún no ha llegado el momento álgido».De las últimas especies ya pudieron recoger ejemplares en la comarca de la Montaña, al igual que las de brezo, aunque las heladas, de producirse, pueden afectar «momentáneamente» a la recogida de estos ejemplares. «La de brezo o platera, que también está ligada a una zona donde hubo rebaños, es muy apreciada, en algunos casos más que la de cardo», opina. 

En este sentido, hace hincapié en la importancia del ganado para la proliferación de hongos de estos tipos. «Sí, las ovejas se comen las setas de cardo, pero si deja de haber en una zona, con el paso del tiempo, dejan de brotar. Está vinculado.Tiene que haber ganado.Es imprescindible. A veces hay gente que llega de la gran ciudad y se queja del olor a oveja en el pueblo, pero tiene que oler así en algún momento para recoger las setas», recuerda.

MÁS AFLUENCIA. Por otro lado,Oria de Rueda explica que el número de personas que cogen una cesta y una navaja y se desplazan al campo a buscar setas está en aumento, llegando, en algunos casos, desde otras provincias. «Cada vez hay más personas que vienen, incluso gente que no había recogido en su vida», asegura el director de la Cátedra. «Y aun así, si se dan las condiciones idóneas, hay para todos, aunque parezca mentira», concluye. 

 

Identificación de ejemplares los lunes por la tarde en el aula de medio ambiente de Caja de Burgos

Oria de Rueda explica que los lunes de noviembre, en horario de tarde, estará identificando setas en el aula palentina de medio ambiente de Caja de Burgos (avenida de Santiago Amón, 3) para evitar posibles equívocos y sus consecuencias. «Que la gente que no conoce los hongos que ha recogido o no está seguro venga a preguntar», comenta el director de la Cátedra. Eso sí, ruega a todos los que quieran acercarse «que lleven la seta entera». «Les digo que la traigan completa por si hubiera algo importante en el pie para identificarla correctamente.Tampoco vale que traigan una foto de Whats App a quince metros. De esta manera es imposible», añade.

Asimismo, comenta que existen diferentes asociaciones micológicas por toda la provincia que pueden servir de ayuda a la hora de identificar setas. Algunos ejemplos son la Asociación de Guías Micológicos Corro de Brujas y las Asociaciones Micológicas Montaña Palentina, Palencia Norte, Quercus y Regius.

Por otro lado, indica que no confíen al 100% en el contenido que aparece en ciertas aplicaciones móviles.  «Las app que informan a través de una fotografía de si una seta es peligrosa o comestible no son una garantía absoluta y pueden darse casos de envenenamientos por seguir a pies juntillas sus dictados», expone antes de recordar que «cada día, más gente va con el móvil identificando setas y se fía de ellas como si reunieran toda la verdad y nada más que la verdad». «No me hacen caso y responden que la app del móvil dice lo contrario, como si fuera la verdad absoluta.Solo confían en su móvil. Hacen mal», se lamenta Oria de Rueda. 

Por ello pone el ejemplo de la lepiota. «La app, a veces, no calcula bien el tamaño de la seta y la da como grande, que es comestible, cuando realmente es pequeña y mortal. No es ninguna broma», manifiesta. «La aplicación puede servir para hacerse una idea, pero, en ciertas especies, no lo hace bien y te pone una parecida», declara antes de incidir en que en países como Francia se han dado casos de «tragedias» por esta cuestión.