Ilia Galán

Ilia Galán


Rehabitare

24/04/2023

Mis pasos surcan ahora la península itálica de la mano de universidades umbras y toscanas; leo la noticia en estas páginas sobre convenios de la Junta y la Diputación que rehabilitan viviendas y ofertan para el alquiler. En tierras italianas también hay aldeas que se vacían y las casas poco a poco en ruinas quedan. En algunas regiones han regalado edificios para que las habiten, o las vendieron a un euro con la condición de rehabilitarlas y el plan está funcionando, sobre todo después de la última plaga del coronavirus. Una clave de su éxito ha sido la publicidad, otra la facilidad para lograr esas ayudas. No ha sido lo mismo con el plan del presidente del gobierno italiano que subvencionaba casi el 90% de las reformas en casas para aislarlas energéticamente y prepararlas para el ahorro... Un laberinto administrativo dejó embarrancados muchos proyectos, embrollo en el que también liaron a los bancos como ahora sucede entre nosotros con los paneles solares, en algunas regiones hispánicas. 
Las ciudades se llenaron y se malvive en muchas de ellas; en cambio, los pueblos y aldeas se fueron despoblando dejando caer las casas sin beneficio ni para propietarios ni para otros.
Hacen falta viviendas sociales y los planes han incorporado otras siete casas, 74 en total; pueden resultar un modelo si la tramitación es eficiente. Este proyecto nacido en Palencia se está exportando ahora a otras provincias y es que esto reactiva la economía del entorno rural, cuida del patrimonio y permite que se sostengan las pequeñas poblaciones con nuevos habitantes. Cada vez es todo más complicado en las administraciones, en los bancos, y eso lastra las acciones que buscamos. Ayer me bloqueó el banco porque había olvidado uno de los mil códigos que uso, menos mal que al llamar se puso al teléfono el director y todo quedó apañado, pero los sistemas burocráticos en vez de ayudar cada vez son impedimentos más graves para todo, habría que enseñar a los administrativos a simplificar y facilitar en lo posible todo.
Más localidades quieren solicitar esas ayudas que se presumen exitosas. Sea bienvenida la vida sencilla de los campos.