El viceconsejero de Sanidad, Planificación y Resultados en Salud, Jesús García-Cruces Méndez, presentó ayer los nuevos vehículos destinados al transporte sanitario urgente -que se espera se puede disponer de ellos «a lo largo de abril»- para el Área de Salud de Palencia, que aumentan de 15 a 22 con la incorporación de tres ambulancias más para soporte vital avanzado (USVA), que pasan de cinco a ocho, y de cuatro más de soporte vital básico (USVB), que aumentan de 10 a 14, según el contrato adjudicado por la Junta de Castilla y León.
El contrato, adjudicado a la UTE Ambulancias Rodrigo, por un importe de 39.365.891 euros, determina que el número total de vehículos para Palencia pasa a ser de 60 (frente a los 52 anteriores), repartidos en las citadas 22 ambulancias de soporte vital para transporte urgente y otros 38 recursos no asistenciales para transporte programado.
Firmado en enero, el nuevo contrato de transporte sanitario (tanto para emergencias como programado) representa un «esfuerzo», y es que supone un «incremento signicativo» puesto que el previo ascendía a 19 millones de euros y este a 39. «Va a dar mucha capacidad de gestión, que en emergencias sanitarias es fundamental, porque viene diseñado para que pueda haber modificaciones si en un momento dado se detectan deficiencias. La esencia de la atención sanitaria de emergencias es llegar cuanto antes al paciente. Y sobre esa base se diseña todo», afirmó García-Cruces.
Según explicó el viceconsejero, gracias a esta inversión, la ratio de población de referencia por recurso urgente se sitúa en Palencia en 52.649 habitantes por USVA, frente a los 84.645 de media en Castilla y León y en 14.359 por USVB, frente a los 16.574 regionales.
En transporte sanitario urgentge, la Gerencia Regional de Salud implementa tres nuevas USVB, que estarán operativas todo el año y darán atención preferente a las zonas básicas de salud de Frómista, Torquemada y Villarramiel. Además, la implantación ya conocida de la unidad de Enfermería de emergencias (UENE) de Guardo permite dar respuesta a la zona noroeste, ya que con la finalidad de realizar un uso más eficaz de las ambulancias, esta USVB se desplaza a zonas territoriales que necesitan mejorar los tiempos de respuesta, como es la zona de Villada.
Jesús García-Cruces explicó también que otra novedad del nuevo contrato es que introduce la figura de una persona de referencia del servicio de transporte sanitario no urgente que estará en los hospitales, con la función de coordinar entre el centro de Sacyl y el centro de movilidad de recursos de la empresa adjudicataria, lo que mejorará tiempos de espera y de traslado de pacientes.
El viceconsejero de Sanidad comentó, referido al transporte programado no urgente, que se aumenta de 37 a los 38 recursos, pero con una diferencia sustancial: se pasa de 22 a 31 ambulancias de transporte colectivo, lo que permitirá mayor agilidad y eficacia en los traslados diarios, cifra que incluye la puesta en funcionamiento de ocho nuevos vehículos del tipo A2 3 SII; es decir, ambulancias colectivas adaptadas para sillas de ruedas.
Las ambulancias convencionales de clase A1, destinadas al transporte de una sola persona, se reducen de 15 a siete, al igual que lo hacen también en toda la Comunidad y en toda España, ya que se ha preferido contar con más vehículos modulables y adaptables para una persona o varias (lo que sólo se puede hacer con clase A2), según las necesidades de cada momento.