Carnaval en Palencia: De héroes a animales y oficios

César Ceinos
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El atuendo, que en muchos casos es una decisión de última hora saca a la luz la imaginación del comprador: los clásicos tienen tirón, pero las novedades también gustan

El encargado de la tienda de Toy Planet de la calle Mayor, Raúl Palenzuela, saca de su caja un disfraz de Batman, una opción que gusta especialmente a los más pequeños. - Foto: Óscar Navarro

El Carnaval es uno de los momentos del año más indicados para dejar actuar a la imaginación, perder la vergüenza y pasar horas de fiesta transformado en otra persona, en un animal o, incluso, en un ser fantástico que únicamente tiene cabida en los tebeos, en los libros o en las películas. Para ello, claro está, es muy importante llevar un disfraz y unos complementos adecuados. Al tratarse de una celebración apta para todos los públicos, la variedad de atuendos es muy amplia. Se han utilizado ya en desfiles escolares, en pasacalles organizados en las diferentes localidades de la provincia hasta este martes y en bares las altas horas de la madrugada que la licencia del establecimiento hostelero lo permita. Eso sí, el objetivo es el mismo: divertirse antes de la llegada de la Cuaresma. Si es posible, con un disfraz que abrigue o que permita ponerse ropa de abrigo por debajo. En estas fechas, el calor se queda en Río de Janeiro (Brasil) y Santa Cruz de Tenerife, no en Palencia.

Entre los más pequeños, los trajes de superhéroes han sido los más demandados, aunque también han gustado mucho los de animales, según explica el encargado de la tienda de Toy Planet de la calle Mayor, Raúl Palenzuela. Superman, Hulk, Spiderman, Capitán América, Black Panther, Batman… un grupo de escolares puede ir disfrazado de personajes de cómics y películas sin repetir ninguno. Además, desde la televisión llegó a las estanterías de los negocios la opción de Pikachu, uno de los protagonistas de la conocida serie Pokemon. Por otro lado, los clásicos, como policía, pirata, arlequín o indio, también han tenido su cuota de mercado.

Los adolescentes se han decantado por la ficción. Palenzuela destaca que el disfraz de atracador de la serie de La Casa de Papel sigue gustando, al igual que pasarse al lado oscuro de la fuerza con el disfraz de Darth Vader, el mítico antagonista de la saga de La Guerra de las Galaxias. Entre los que están más ligados a la actualidad ha destacado el de Miércoles. La plataforma Netflix emite una secuela de La Familia Addams centrada en la hija y eso ha tenido su repercusión en el Carnaval. En este caso, se trata de una caracterización que también ha gustado a gente con más edad. 

En cambio, los mayores han apostado por los disfraces tradicionales para salir en grupo, bien todos iguales, bien unidos por una temática. Ha predominado la fauna (lobo, cerdo, pollo…), pero otros que se han vendido muy bien han sido los de cura, monja, agente de la guardia civil, bombero o hippie.

Respecto a años anteriores, las ventas se han recuperado «un poco». En 2022 aún había limitaciones y estas fiestas de invierno no pudieron celebrarse en todo su esplendor. Palenzuela comenta que se nota que se han organizado en la provincia más actividades en esta ocasión. Pese a conocerse la fecha con muchos meses de antelación, la mayoría de los clientes ha acudido a adquirir su disfraz en la última semana, aunque «se pueden comprar durante todo el año». 

Los días previos al Carnaval suelen ser los de mayor demanda de disfraces del año, aunque desde hace más de un lustro están por detrás de las jornadas anteriores a Halloween. La influencia anglosajona del 31 de octubre está muy asentada en la provincia y es habitual encontrarse a gente disfrazada de forma lúgubre. Algunos apuestan por una temática muy carnavalera, si bien le ponen un punto de sangre o le dan un aspecto mortal. Otro período señalado para la adquisición de trajes es en la época de las fiestas en los colegios.

Por su parte, los adultos, de manera puntual, acuden para comprar disfraces y complementos que utilizarán en las despedidas de soltero.