El sector de la hostelería tiene en Guardo uno de sus más fieles representantes en la provincia, de ahí que no es de extrañar que los actos en honor a la patrona del gremio, SantaMarta, se celebren allí casi a la altura de una fiesta patronal.

Cincuenta bares y restaurantes de la localidad minera echaron ayer la persiana para conmemorar esta efeméride con un variado programa que abrió en la noche del martes el pregón del chef guardense con Estrella Michelín Alvar Hinojal (restaurante Alquimia, Valladolid) y que continuó ayer con misa, vermú musical, castillos hinchables par los más pequeños, comida de hermandad y música de la mano del dj Héctor Calderón, Clásico Rocks, Freak Circus, Filopalidis, King of Rock Tribute y el dj local Pierre May.

Durante su pregón, Hinojal desgranó la receta del éxito. «De primero, cabeza; de segundo, corazón; y de postre, cojones» señaló durante una aplaudida alocución en la que fue coreado por sus compañeros de fatigas al otro lado de la barra del bar.

El promotor de esta edición fue el restaurador Toni Speranza, un italiano que se enemoró de Guardo y sus gentes, a los que ha deleitado durante años con su «genuinas pizzas», según destacó la organización de este evento con el que colaboró también el Ayuntamiento de la localidad norteña.

El alcalde, Juan Jesús Blanco, destacó el papel de la  hostelería y el comercio local como «como fuente de riqueza y dinamización» de la España de interior, a la que se refirió como una España «medio llena que hay que contribuir entre todos a acabar de llenar».