El Regio, un maestro de oro

Rubén Abad
-

Palencia rinde homenaje a Félix López en el 50 aniversario de su alternativa

El Regio, un maestro de oro

Palencia, 2 de septiembre de 1973. Mientras la capital provincial se preparaba para celebrar el día grande de los sanantolines de aquel año, un joven palentino llamado a triunfar en las plazas de toros de todo el país contaba las horas para tomar la alternativa ante una entregada afición que a la postre le acompañaría durante toda su carrera profesional.

Nos referimos a Félix López, más conocido en los circuitos taurinos como El Regio, que este 2023 cumple 50 años de alternativa. Una gesta que muchos persiguen y solo unos pocos consiguen, hasta el punto de que la plaza de toros deCampos Góticos le homenajea hoy con una corrida goyesca organizada en su honor con la presencia de los diestros José María Manzanares, Roca Rey y Tomás Rufo, y  toros de Núñez del Cuvillo.

Tanto tiempo ha pasado que ni siquiera el coso en el que hizo aquel paseíllo inaugural existe ahora (se ubicaba en lo que hoy se conoce como Bigar Centro), pero son muchos los que recuerdan aquel día del patrono como si fuera ayer, a pesar de que desde aquella fecha ha transcurrido ya medio siglo.

 «Había lidiado muy poco de novillero con caballos, pero me encontraba muy decidido a tomar la alternativa porque llevaba dos años toreando en los pueblos todo lo que me salía. Me moví mucho», aseguraba el torero en un reciente reportaje de Diario Palentino. Aquel día tuvo de padrino a Manolo Cortés y de testigo a Dámaso González, que con su actuación robó parte de protagonismo al que jugaba en casa. Cortó cuatro orejas y dos rabos.

Una tarde que fue el comienzo de una carrera de la que conserva muy buenos momentos vestido de luces, con especial predicamento en la plaza de Barcelona. Su buen hacer le llevó a entrar en muchas ferias destacadas y a confirmar la alternativa en la plaza de Las Ventas de Madrid justo un año después de doctorarse en Palencia, con Sánchez Bejarano como padrino y Rafael Torres como testigo. «Es un halago grandísimo. Todos  deseábamos ir a torear a esa plaza; entrar en esos carteles era muy difícil», recuerda.

El Regio hizo un buen papel a nivel nacional, y también en casa. Aquí toreó en numerosas ocasiones junto a Paquirri y El Niño de la Capea. «La gente venía a la plaza porque le gustaba muchísimo la terna y siempre salía bien», rememora el deBaltanás. Una carrera brillante para una figura que llevó el nombre de Palencia a lo largo y ancho de España hasta que en la década de los 80 lo dejó, eso sí, sin llegarse a cortar la coleta.