El medicamento antidiabético Ozempic, que también se está usando contra la obesidad, y el antiepiléptico Depakine son dos de los fármacos que más problemas de suministro presentan en las farmacias de la provincia, según detalla el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos, José Luis Nájera, tras admitir que la situación en el sector «sigue igual» que en los meses anteriores. «Hay medicamentos que van cambiando. A veces falta uno y en otros momentos, otro, aunque también hay algunos con problemas permanentes y que son más difíciles de conseguir», explica el responsable de la organización colegial palentina.
Palencia, como el resto de España, continúa con un déficit de suministros que engloba a más de 900 productos, según la información publicada en la página web de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps). Pese a esta cifra, que supera en 300 a la registrada en diciembre de 2022, el organismo estatal asegura que las prestaciones de impacto mayor, las que más trastorno causan a los pacientes, «se mantuvieron en números bajos». De hecho, Nájera insiste en que «en la mayor parte de las ocasiones» en las que falta un producto en la farmacia «existe una alternativa terapéutica y podemos sustituirlo por un genérico o por otro tratamiento», aunque admite que esta situación provoca que no puedan dar una respuesta clara a los usuarios.
Ante esos hechos, el presidente de los boticarios palentinos recuerda que la Organización FarmacéuticaColegial «continúa trabajando para evitar esta problemática a los pacientes». «Dictamos a la administración y a la Aemps las faltas de suministro de las farmacias para que puedan tomar medidas con los laboratorios o bien para que avisen a los médicos para que prescriban un medicamento que se pueda sustituir antes de que acuda a la farmacia». Además, destaca el uso de la herramienta Farmahelp -«creada en Palencia», apunta- para encontrar productos con problemas de suministros en otras farmacias y así evitar posibles trastornos en los pacientes.
Por otro lado, el presidente recuerda que la política de bajos precios vigente en España dificulta el suministro, ya que «provoca que las marcas prefieran enviarlos antes a otros lugares donde tienen un mayor rendimiento económico». «Nuestros gobiernos podrían intentar no aplicar políticas que fomentan o agravan el problema.Entiendo que bajar el precio puede ser positivo a corto plazo, pero está generando problemas que también son importantes. Hay una reducción en el gasto, pero hay tratamientos que no llegan a los pacientes», subraya.
Además, explica que la concentración de la industria farmacéutica en macrofábricas en Asia en detrimento de otras más pequeñas ubicadas en diversos países facilita que, cuando surge algún problema, haya una gran repercusión a nivel mundial porque no hay otra opción. «Antes había varias factorías más pequeñas en diferentes países y cuando había un problema en una tiraban de la otra», comenta.
Por el contrario, Nájera detalla que uno de los medicamentos que ya no está generando grandes inconvenientes en los negocios de la provincia es la Amoxicilina. «En este caso fue un problema puntual por la falta de cristal derivada de la crisis ucraniana, que parece que se ha solventado», concluye.
LUDA PARTNERS. Además de los fármacos citados por Nájera, desde LUDA Partners, una red a la que está adherido un 10% de las farmacias de la provincia, exponen que los medicamentos que presentan más problemas de desabasteimiento son los antidiabéticos Victoza y Trulicity, el Imigran (que está indicado para aliviar el dolor de cabeza y otros síntomas de un ataque de migraña) y el Trandate (que se utiliza para el tratamiento de la hipertensión arterial).
Recientemente, esta organización publicó el primer Informe sobre el desabastecimiento en el que se abordan las causas que provocan la falta de medicamentos. Entre ellas, citan la influencia de las tendencias de redes sociales en casos como el Ozempic, un aumento puntual de la demanda, los conflictos internacionales y los aumentos de los costes de producción.
Por último, aportan dos factores de los que cita el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Palencia: la regulación de precios y la concentración de producción en pocos países.