OPINIÓN.- Quienes firmamos este artículo de opinión, queremos manifestar públicamente nuestra visión reflexiva y coherente con nuestro ideario ante el cariz que están tomando últimamente los acontecimientos políticos en España.
Nos resulta doloroso comprobar cómo algunos afiliados de la denominada vieja guardia del Partido Socialista Obrero Español han transgredido tristemente un valor inalienable en todo socialista: la lealtad. 
Felipe González, Alfonso Guerra, Joaquín Leguina, José Luis Corcuera, Nicolás Redondo y otros antiguos dirigentes socialistas dedican todos sus afanes a preparar el asalto de la derecha al poder. 
Nosotros nos rebelamos contra esos métodos cuando menos espurios. En efecto, estos exdirigentes apelan a una realidad demostrable y tangible: que este partido no es el mismo en el que ellos trabajaron. Y tienen toda la razón. El PSOE de la etapa de Pedro Sánchez se parece bastante al de la etapa de José Luis Rodríguez Zapatero y muy poco al del periodo de Felipe González. Pero es que la trayectoria de este último tampoco tiene nada que ver con el ciclo de Rodolfo Llopis en el exilio, al tiempo que la etapa de Llopis se diferencia claramente de la de Indalecio Prieto, Largo Caballero y Juan Negrín, y no digamos si comparamos la acción política de estos con la del mismísimo Pablo Iglesias. 
La estrategia del PSOE siempre ha sido la misma: conseguir una sociedad más libre, justa y solidaria. Lo que cambia es la táctica de cada momento. Cada ciclo histórico requiere soluciones distintas ante problemas distintos. Pero los exdirigentes citados obvian ese elemento esencial de la acción política. Felipe González y Alfonso Guerra anteponen sus ideas peregrinas al desarrollo de ese país al que con tanto acierto sirvieron.
Por fortuna, ciento y cientos de exdirigentes socialistas de la etapa de González y Guerra ( o sea, la mayoría) no doran la píldora a este grupo de disidentes y manifiestan continuamente el apoyo moral y efectivo al Gobierno de coalición dirigido por Pedro Sánchez. Los exabruptos de estos exdirigentes quedarán como una anécdota porque, sencilla y llanamente, la inmensa mayoría de los socialistas estamos con Pedro Sánchez y condenamos enérgicamente la campaña desmedida de insultos, amenazas, dicterios que la derecha montaraz y sus medios afines lanzan sistemáticamente contra los miembros del Gobierno. El «todo vale» se tiene que acabar.
Manifestamos nuestra confianza en que Pedro Sánchez seguirá actuando como hasta ahora, con el máximo respeto a la Constitución, fomentando leyes de acción social propiciadoras de la convivencia entre los españoles. Recordamos, por último, que a la derecha y a los mass media que la representan no les interesa hablar de los logros políticos conseguidos en la pasada legislatura por el Gobierno de coalición del PSOE y Unidas Podemos, salario mínimo vital, revalorización de las pensiones, etc., por lo que han optado por la mentira sistemática y la provocación . No entraremos en ese juego, nos vamos a defender democráticamente y vamos a seguir formando parte de ese enorme apoyo social al próximo Gobierno , lo mismo que hicimos solidariamente en su día con los gobiernos de Felipe González y Rodríguez Zapatero,
Porque nosotros sí somos grandes especialistas en ese término tan denostado como es la lealtad.

Fdo.- Enrique de Guzmán Mataix (exsecretario de Comunicación del PSOE de Palencia), Lucinio Morate Laso (exalcalde socialista de Mazariegos), Agustín Manrique González (exsecretaruio de Organización del PSOE de Palencia), Miguel Ángel Liras Padilla (exconcejal socialista de Torquemada), José María González Corrales (exalcalde socialista de Villada) y Sabino López Prado (exconcejal socialista de Paredes de Nava)