Había que hacer lo que se ha hecho durante toda la temporada regular en casa y se hizo. El Zunder Palencia llevó al extremo sus virtudes para superar a HLA Alicante en el primer partido de la serie al mejor de cinco. Los palentinos golpean en primer lugar.
Pedro Rivero disponía sobre el parqué su quinteto habitual en las últimas jornadas. Pese a la recuperación de McGrew, el segoviano apostaba de inicio por Kostadinov, muy mejorado en las últimas semanas. Los primeros puntos de la eliminatoria los selló el visitante McDonell, que anotaba desde el perímetro para poner a HLA Alicante por delante. Respondía Kostas, con un mate que levantó al público por primera vez en la noche de ayer. Inmediatamente después, Kasibabu lograba un 2+1 para poner a Palencia por delante, pero los alicantinos mostraban fluidez en el ataque para volver a colocarse con ventaja. Acto seguido se sucedía un tramo de desacierto tanto local como visitante, que acabó con Wintering suspendiéndose desde los 6,75 metros para sumar sus primeros tres puntos del encuentro. Kasibabu, el morado más inspirado en el inicio, machacaba e intervenía en el marcador antes de sentarse para dejar su lugar a un McGrew que reaparecía tras su lesión. Rakocevic calmaba las aguas desde la línea de tres, pero Kostadinov volvía a hacerse fuerte en la pintura para aumentar la diferencia. En la siguiente jugada, Wintering entraba como una exhalación a canasta para sumar dos nuevos puntos y obligar a Rafa Monclova a pedir el primer tiempo muerto del choque (17-10 a falta de 2'08). Los reajustes no terminaron de cerrar las vías de anotación del Zunder, que cerró el primer acto con el 20-14 en el marcador.
Como ocurrió en el primer cuarto, los palentinos dominaban su aro, lo que les permitía gozar de numerosas posesiones, que aprovechaban en ataque. Lo hacía Chumi Ortega con un triple que colocaba el 23-16. El capitán colegial cortaba un pase para recuperar y anotar. En la siguiente jugada, Manu Rodríguez acertaba desde la línea exterior, pero HLA Alicante contrarrestaba y Pedro Rivero paraba el partido utilizando su primer tiempo muerto (28-22 a falta de 5'27 para el descanso). Los ajustes surtieron efecto y Palencia encadenó un parcial de 4-0 que les puso diez puntos arriba (32-22, tiempo muerto de Monclova a 4'41). La intensidad en defensa de los locales no podía ser mejor, negando continuamente las opciones en ataque de Alicante, muy pobre en anotación. Además, encontraban con facilidad la canasta rival, hasta el punto de que, a falta de un minuto para el intermedio, Palencia aventajaba en 20 puntos a los de Monclova. Kasibabu machacaba y anotaba el tiro libre adicional para cerrar la primera parte (47-24).
SEGUNDO TIEMPO. La segunda mitad comenzó mucho más igualada de lo que culminó la primera, con un Zunder que no cerraba igual de bien los espacios, lo que permitía a Alicante jugar en ataque con más soltura, si bien es cierto que en el aro opuesto pasaba exactamente lo mismo. Esto no le valía al cuadro visitante que necesitaba cortar el grifo local de alguna forma, pero no lo conseguía. Por ello, Rafa Monclova volvía a parar el duelo a falta de 3'07 para llegar al final del tercer escenario (62-37). Es cierto que Alicante mejoró tras el mismo, pero el final del cuarto acabó con la dinámica visitante (66-46).
Los hombres de Monclova comenzaron el último periodo, de nuevo, enchufados, firmando un parcial de 5-7 a favor con el que acabó un tiempo muerto a petición de Pedro Rivero. Tras la reanudación, los morados contestaron con un 6-0 que provocó una nueva pausa, esta vez ?solicitada por Rafa Monclova. En el último tramo del duelo, el Zunder Palencia acabó gustándose para poner el broche de oro a una gran noche en el pabellón. El encuentro finalizó 88-57.