La Asociación de Fibromialgia y Fatiga Crónica de Palencia, Afacyl, se vio ayer desbordada -en el mejor sentido de la palabra-, y es que se superaron con creces las expectaticas. En la presentación de la carrera se habló de conseguir al menos  800 inscritos, en la tónica de ediciones pasadas, y se alcanzaron los 950, lo que representa un «rotundo éxito», según señalan desde la organización, que sitúa esta sexta entrega como la más  multitudinaria, además de que todo se desarrolló con absoluta normalidad, «como un día de fiesta», más cuando había previsiones de lluvia y viento. Estas sí que motivaron un cambio  en la salida y la meta, que tuvo lugar en el pabellón de deportes de Villalobón-la llegada resultó algo más dura al ser cuesta arriba-. 

La carrera pudo realizarse a gusto del inscrito (corriendo, andando, en patines o en bicicleta, entre otras posibilidades), y fueron unos cuatro kilómetros para la categoría absoluta (hasta los nacidos en 2009) y entre 750 y 600 metros en las categorías infantiles, con unos 280 participantes,  (infantil, nacidos en 2010 y 2011; alevín, 2012 y 2013; benjamín, 2014 y 2015; prebenjamín, 2016 y 2017; y chupetín, a partir de 2018). 

Tras finalizar la carrera, se llevó  a cabo una degustación de paella por cuenta del Ayuntamiento de Villalobón, en la que se repartieron unas 850 raciones. También hubo sorteo de regalos.

El objetivo de esta carrera es que  «las personas que no conozcan la enfermedad puedan saber la realidad de lo que pasamos», según detalló Pilar Fernández, presidenta de la asociación. La recaudación será destinada a «potenciar el personal y las actividades» realizadas por la entidad, explicó.

La fibromialgia, que afecta al 4% de la población, es una patología complicada de sobrellevar para quienes la padecen, que en un 90% son mujeres. Produce bloqueo muscular, afecta a nervios y tendones y dolor constante. Además los afectados suelen desarrollar patologías asociadas como colon irritable, alergias de carácter ambiental y a medicación o sensibilidad a la luz, lo que sumado a la imposibilidad de tener un sueño reparador, hace que los pacientes necesiten abordar la enfermedad de una forma integral que incida en lo físico y en lo mental. Afacyl, con sede en el centro de día de mayores San Juanillo), ofrece, entre otros, los servicios de información y asesoramiento, taller cognitivo-conductual y  atención psicológica.