El 5 de noviembre se celebra el Día del Payaso de Hospital, una efemérides que en Palencia tendrá su reflejo este sábado, jornada en la que está programada una carrera solidaria de narices rojas -inscripción 3 euros- con recorrido de 1,5 kilómetros. La salida se dará a las 18 horas en la plaza Mayor, para llegar hasta el Salón y regresar después al punto de partida. Serán tres las modalidades: mayores, jóvenes y chupetes -peques de 2 a 6 años-.
La ONG Cazasonrisas Payasos de Hospital de Palencia, representada por Carlos Herrero, presentó ayer acompañado de la concejala de Bienestar Social del Ayuntamiento, Raquel Martín, el festival anual de Payasos de Hospital, que este año en su octavo aniversario en Palencia, agrupa la citada carrera más hinchables, globoflexia... e información sobre su labor en horario de 12 a 14 y de 17 a 20 horas en la plaza Mayor.
«Desde el Ayuntamiento lo primero que queremos es felicitar a esta organización por su octavo aniversario, algo complicado teniendo en cuenta que su labor es totalmente altruista. En segundo lugar, agradecer el magnífico trabajo que hacen ayudando a que los más pequeños que se encuentran hospitalizados lleven mejor ese tiempo de convalecencia, así como a los mayores que viven en residencias para que tengan una fórmula más de divertirse y ocupar su tiempo de ocio. Y en tercero y último, manifestar nuestro compromiso de apoyo y colaboración con la actividad de esta asociación en la medida de nuestras posibilidades, aprovechando la ocasión para invitar a todas las familias con niños a que se acerquen el sábado a disfrutar de todas las actividades que desde la organización han previsto con todo el cariño del mundo», señaló la concejal de Bienestar Social, Raquel Martín.
Carlos Herrero explicó que la labor de los payasos de hospital es «desdramatizar» el ambiente hospitalario. Se trata de que «desde el clown, desde el niño que llevamos dentro, del corazón del payaso al corazón de niño estar emocionalmente en conexión», explicó. «Trabajamos habitación por habitación. Entramos y rompemos un poco ese ambiente hospitalario que no es que sea serio. Con una sonrisa desbloqueas emocionalmente cualquier conflicto, y nos ha pasado no solo con los niños, sino con los padres», comentó.
Payasos de hospital es un proyecto con más de 50 años, según contó Carlos Herrero, y existe un buen número de estudios que «demuestran que tiene una efectividad curativa en el proceso de recuperación; los niños con tratamiento de payasos de hospital se restablecen un 15% más rápido, emocionalmente están mejor».
Payasos de Hospital son ahora en Palencia siete -también van a residencias- y en grupo Cazasonrisas una docena.