El vicesecretario de Cultura del PP, Borja Sémper, ha vuelto a insistir en que hablar y escuchar a Junts no quiere decir "ceder" ni "venderse" al partido independentista catalán como tampoco "es lo mismo que irse a Waterloo o estar dispuesto a impulsar una ley de amnistía" como sí que está dispuesto a hacer el PSOE.

En rueda de prensa al término de la reunión del Comité de Dirección del PP en Génova, Sémper ha vuelto a defender que el partido hable con Junts de cara a la investidura de Alberto Núñez Feijóo pero ha dejado claro, como ya hizo ayer el líder de los 'populares', que "escuchar no quiere decir ceder, escuchar no quiere decir venderte".

El PP, ha recalcado Sémper, no entiende la política "como un mercadeo" sino que a lo que aspira es a cambiar el "guion" de la política española y devolver, con el ejemplo de hablar con todos los grupos salvo EH Bildu, la "normalidad institucional".

"Esto no es lo mismo que irse a Waterloo, que es lo que está dispuesto a hacer Sánchez" para hablar con el líder de Junts, Carles Puigdemont, ni "estar dispuesto a impulsar una ley de amnistía" como desde el PSOE ya han indicado que están dispuestos a hacer y ya están buscando la "fórmula jurídica" para ello, ha defendido.

Sémper ha denunciado que lo que antes era un "tabú" ahora es visto por algunos dirigentes socialistas "como una hipótesis factible y como algo posible" pese a que en 2017 el PSOE rechazó, como miembro de la Mesa del Congreso, una propuesta de los independentistas de ley de amnistía.

El PP ve un "despropósito" la amnistía

Por lo que se refiere al PP, sigue pensando de la misma manera que en 2017: "una ley de amnistía no tiene cabida en nuestro ordenamiento constitucional", ha recalcado, acotando que también consideran "un despropósito" pretender aprobar una ley de este tipo a los eventuales apoyos de cara a una "hipotética investidura".

Según Sémper, esto no sería pues "una medida pensada en el interés general de los españoles, sino pensada y enfocada a dar satisfacción, a dar respuesta a los intereses de un solo hombre". "Y no estoy pensando en Puigdemont, sino que estoy pensando en Pedro Sánchez", ha puntualizado.

Igualmente, ha cerrado la puerta a que el PP pudiera valorar alguna otra medida dentro de la Constitución para beneficiar a todos los encausados por el procés y el 1-O. "Beneficiar a quienes, por muy independentistas que sean, se han saltado la ley, con nosotros que tampoco cuenten", ha aseverado.

Voluntad de diálogo con Junts

Así las cosas, ha vuelto a defender la voluntad del PP de hablar con Junts de cara a la investidura, como lo hará con el resto de grupos parlamentarios con la salvedad de EH Bildu, pero ha aclarado que será a nivel de representantes en el Congreso y no cabe esperar ningún tipo de contacto de Feijóo con el líder de esta formación.

El dirigente 'popular' se ha amparado en la voluntad del partido de devolver la "normalidad institucional" y de "dar ejemplo". "Llevamos demasiado tiempo hablando de amnistías, llevamos demasiado tiempo hablando de referéndums de independencia y muy poco tiempo hablando de los problemas reales de los españoles", ha denunciado.

Por eso, lo que Feijóo quiere hacer es hablar con los grupos parlamentarios "de lo que consideramos que importa y que preocupa a España y a los ciudadanos" como es la economía, la fiscalidad, la sanidad o la educación y de "la necesidad de regenerar institucionalmente nuestro país".

Si después de esos contactos, algún partido político "nos viene con otro guion, la respuesta será no, porque nosotros no vamos a hablar de los intereses particulares de nadie, vamos a hablar de los intereses generales de los españoles".

El PP no cederá sobre la unidad de España

Al hilo de esto, ha reiterado que el PP "no va a ceder nunca" respecto a la igualdad entre españoles, a una hipotética ley de amnistía o sobre la unidad de la nación española. "Sobre esto no vamos a ceder nunca, ni tan siquiera para alcanzar la presidencia del Gobierno", ha aseverado.

Respecto a los contactos con los de Puigdemont, el vicesecretario de Cultura del PP ha querido restar importancia a las diferentes posiciones manifestadas por dirigentes del partido respecto a Junts, preguntado principalmente por el rechazo rotundo de su líder en Cataluña, Alejandro Fernández, a hablar con esta formación.

"Nosotros no somos una secta, somos un partido político en el que puede haber matices, puede haber opiniones, puede haber tuits", ha afirmado, remitiendo a la postura expresada la víspera por Feijóo en Soutomayor (Pontevedra) ante los líderes territoriales del partido, entre los que no estuvo Fernández.

No entra en la división en el PNV

Por lo que se refiere a posibles divisiones en las filas del PNV, cuya cúpula ha recalcado que no respaldará la investidura de Feijóo, después de que un antiguo alto cargo haya apostado por la abstención en la votación de finales de septiembre, Sémper se ha escudado en que el PP no se mete nunca en "debates internos" de otras formaciones.

El dirigente 'popular' ha admitido la dificultad que entraña para el PP reunir los cuatro votos que le faltan a Feijóo para poder ser presidente, pero ha dejado que no están dispuestos a tirar la toalla aún sino que en el mes que resta para el debate se afanarán por trasladar a todos los grupos políticos su propuesta para España y su modelo contrapuesto al de Sánchez.

"Es una vía que probablemente no dé resultado, o sí, pero es una vía que estamos obligados y convencidos que tenemos que emprender", ha reivindicado Sémper, incidiendo en que los 8 millones de votantes del partido, sumados a los tres millones de votantes de las otras tres formaciones que ya han dado su aval a Feijóo (Vox, UPN y CC) han manifestado que quieren "un proyecto alternativo" a Sánchez.