La búsqueda de piso se comienza a complicar un año más. A mediados de agosto, a menos de 20 días de comenzar el nuevo curso universitario, hay estudiantes que aún no ha conseguido una habitación donde alojarse  y es que los precios de los alquileres no facilitan las opciones. En los últimos tres años, el precio medio en una vivienda compartida ha subido 106 euros. 

Nadia Díaz, procedente de Santander, ha estudiado Educación Social en el campus de la Yutera y se queja de lo alto que es el precio de alquiler desde la pandemia de la covid-19. «Recuerdo que cuando llegué a Palencia a estudiar los costes por habitación eran bastante asequibles, sin embargo ahora están disparados y en muchos no te incluyen los gastos de luz, agua, gas y wifi», apunta Díaz.

El alquiler no es el único problema que encuentra la estudiante. «Muchos de los pisos con los que he contactado me exigen presentar mi última nomina y un contrato actual. No nos facilitan la búsqueda nada», afirma Díaz. «Solo hay dos residencias de estudiantes, por tanto los arrendadores saben que si ponen el precio que ellos quieran van a tener a gente dispuesta a pagarlo», añade.

La opción de compartir piso es la elegida, prácticamente obligados, por los estudiantes. «Llevo compartiendo piso desde que llegué a la ciudad, sin embargo, este año como quiero trabajar estoy buscando un estudio para mi sola porque el ambiente que hay en un piso compartido no me va a beneficiar para concentrarme en mi trabajo», señala Díaz. 

Dependiendo de la zona donde busques la habitación el precio varía. No es lo mismo una en el centro donde el valor medio del alquiler es de 605 euros que en el barrio de Pan y Guindas que es de 568 euros. «Por ejemplo, los pisos en el barrio de San Juanillo que he visto están muy bien y son muy nuevos, pero me pilla muy lejos de la universidad y no me da confianza el vivir allí a pesar de que me hayan dicho que es muy tranquilo», comenta Díaz. «Por menos de 200 euros ya es muy complicado encontrar una habitación cuando antes era de lo que más había», afirma

Según un informe de Fotocasa, el precio medio de alquiler por metro cuadrado es de siete euros. Las características más comunes que se buscan en los pisos de la capital son inmuebles de 70 metros cuadrado con tres habitaciones y en la cuarta planta.

Actualmente, hay 87 inmuebles en alquiler en la capital. Respecto al año pasado, el coste por metro cuadrado ha subido  0,3 euros, aunque el máximo se alcanzó en septiembre de 2022 con 7,1 euros.

La situación en las demás provincias de Castilla y León es similar a la de Palencia. Segovia tiene un precio por metro cuadrado de 10 euros; Burgos, 9 euros; Salamanca, 9 euros; Soria, 9 euros; Valladolid, 8 euros; Palencia, 7 euros;  Ávila, 7 euros; León, 7 euros; y Zamora, 6 euros. A día de hoy, a nivel nacional nos encontramos en el pico más alto de los últimos años con 11,9 euros el metro cuadrado de media. 

En base al último estudio de Precio de la vivienda por CCAA, provincias y capitales de Fotocasa, María Matos, Directora de Estudios y Portavoz de la empresa, afirma que en 2022 los precios de la vivienda en venta aumentaron cada mes con respecto al mismo del año anterior. Después del confinamiento de 2020 hubo un boom por cambiar de vivienda y esto, unido a los bajos precios de las hipotecas, hizo que aumentase la demanda, aunque no tanto la oferta, y que subieran los precios. De hecho, durante 2022 se alcanzaron precios máximos que no se veían desde el boom de 2007.