"Palencia debe tener un museo de la Semana Santa sí o sí"

César Ceinos
-

La Hermandad de Cofradías tiene nuevo presidente después de dos años funcionando con una gestora. Se llama Ricardo Fernández y pertenece al Santo Sepulcro desde que tenía seis años. Asume el cargo con la ilusión de aportar novedades

El presidente de la Hermandad de Cofradías Penitenciales de Semana Santa de Palencia, Ricardo Fernández. - Foto: Óscar Navarro

El nuevo presidente de la Hermandad de Cofradías Penitenciales de Semana Santa de la capital es Ricardo Fernández Ramos (Palencia, 1965). Parece una afirmación sencilla, pero detrás de ella hay dos años de gestora, que estuvo encabezada por Domiciano Curiel (antiguo máximo responsable de la cofradía de Jesús Nazareno y actual concejal y diputado provincial), al celebrarse dos comicios sin que optara ningún candidato para liderar la entidad que agrupa a las nueve agrupaciones religiosas que protagonizan la Pasión palentina. 

Candidato con una amplia trayectoria –explica que lleva 52 de sus 58 años formando parte de la cofradía del Santo Sepulcro-, su primer contacto con este mundo se produjo cuando era un niño de seis años, aunque no lo hizo por herencia familiar. «Era un crío al que le llamaba la atención las procesiones y los tararús y di la paliza a mi familia para entrar en una. Por aquel entonces había una persona que trabajaba con mi padre que era del Santo Sepulcro y ahí aterricé. Y hasta hoy», comenta.

Además, formó parte de la anterior junta de gobierno de la entidad de la que es hermano y en la actual lo sigue siendo. Ahora es uno de los dos alcaldes, que son los encargados de sustituir al hermano mayor en su ausencia.

¿De qué se encarga esta institución compuesta por las nueve cofradías de Semana Santa de Palencia: Vera Cruz, Santo Sepulcro, Jesús Nazareno, Nuestra Señora de la Soledad, Cristo de la Misericordia, Jesús de Medinaceli, Jesús Crucificado, Virgen de la Piedad y Jesús de la Sentencia?
Coordina a todas las cofradías, aúna esfuerzos para mejorar la Semana Santa palentina y organiza los actos que dependen de la Hermandad, como el Pórtico, así como gestiona solicitudes a las instituciones y la logística necesaria para el desarrollo de las procesiones.

¿Por qué decidió concurrir a las elecciones a presidente de la Hermandad de Cofradías?
Realmente no lo decidí yo y ni siquiera pensaba en ello. Fue una decisión del hermano mayor de mi cofradía, Ángel Pérez, que me lo pidió. Además, el resto de miembros de la junta de gobierno del Santo Sepulcro me terminaron de animar. Y por ello acepté.

Hubo otro candidato al puesto, Ramón Polanco, de la cofradía de Jesús Nazareno, por lo que tuvo que llevarse a cabo una elección. ¿Cómo se sintió al ser nombrado?
En primer lugar, ilusión por aportar cosas nuevas. Una persona como yo, que llevo 52 años formando parte de una cofradía y viviendo la Semana Santa, tengo el sentimiento de pensar en cómo puedo ser útil para mejorar la Pasión y el resto de entidades de una ciudad a la que quiero tanto como Palencia. Estoy encantado de colaborar y ayudar en todo lo que pueda. Después, una responsabilidad importante y compromiso. Hay que organizar y estructurar el trabajo de la hermandad.

Tras la designación tuvo que cumplir con otro trámite preceptivo para poder asumir el puesto: la ratificación por parte del obispo de la Diócesis, Manuel Herrero. Posteriormente, nombró al resto de integrantes de la junta de gobierno que le acompañarán, si todo marcha como está previsto, durante los próximos cuatro años. ¿A quién ha elegido?
El vicepresidente de la Hermandad es Antonio Maté, de la cofradía de Nuestra Señora de la Soledad; el secretario, José Carlos Maté, de Jesús de laSentencia; el vicesecretario, Javier García, de la VeraCruz; el tesorero, delCristo de la Misericordia y el asesor de Presidencia, AntonioMotilla, de Jesús Crucificado.

Lleva poco tiempo en el cargo. ¿Ha podido analizar en qué situación se encuentra la Hermandad?
Se encontraba dirigida por una gestora. Por lo tanto, no se hacen proyectos a largo plazo porque esta junta tenía fecha de caducidad. El motivo de esta situación radicaba en que los estatutos de la Hermandad marcaban que su presidente tenía que ser uno de los nueve hermanos mayores de las cofradías. Estos, cuando llega la Semana Santa, están saturados de trabajo y era complicado que alguno de ellos optase. Y si al final lo hacía acababa descuidando una cosa u otra porque es difícil llegar a ambas a la vez.

Ante esta situación, se abrió la posibilidad de que el máximo responsable de la hermandad fuera un hermano que perteneciera a la junta de gobierno de cualquiera de las entidades religiosas y dio como resultado que dos personas nos presentáramos.

¿Y las cofradías disfrutan de un buen estado de salud?
Entiendo que todas están bien. Lógicamente, en la pandemia de coronavirus todas sufrieron. Notamos un ligero descenso de participación que esperamos volver a recuperar. Muchas cofradías tienen una disciplina que se extiende a lo largo de todo el año, como aquellas que tienen banda. Al haberse paralizado todo durante el período de la covid-19, a la gente le cuesta retomarlo.

¿Le han llegado propuestas e ideas para mejorar la Semana Santa?
Estamos en ello, aunque aún está todo muy tierno. La junta de gobierno está recién nombrada y uno de nuestros planes es ese: escuchar a todo el mundo y recoger todas las inquietudes que pueda haber para consolidarlas entre todos y buscar los mayores beneficios para todas las cofradías. Además, hay que hacer una pequeña actualización de los estatutos, hay algunos aspectos que se necesitan cambiar.

¿Podría decirme algún nuevo proyecto que tenga en su mente para poner en marcha en breve?
El principal objetivo es abrir la Hermandad a todos los cofrades de Palencia y que todos sientan que de un modo u otro pueden formar parte de ella. No quiero que se vea como un territorio exclusivo de los hermanos mayores y altos directivos de las cofradías, sino que todos puedan encontrar su hueco en las diferentes comisiones de la Hermandad.

Por el contrario, ¿qué aspectos quiere mantener de los anteriores gestores?
La buena esencia de hacer las cosas bien y las buenas relaciones institucionales. La idea es mantenerlo de la misma manera. Si hemos llegado aquí es porque hay un trabajo previo que agradecer a las personas que han estado hasta ahora. Asumo el cargo para sumar, no a sustituir.

El año pasado se llegó a un acuerdo con la Asociación Thieldón para que artistas palentinos se hicieran cargo de la tarea del cartel promocional de la Semana Santa. ¿Qué opina?
Fue una decisión que tomó la anterior gestora. Está en marcha, se respeta y me parece una buena idea.

Por otro lado, una de las demandas recurrentes de la Hermandad es el museo de la Semana Santa
Sí, es uno de los proyectos que quizá llame más la atención. Una ciudad como Palencia, con una Pasión declarada fiesta de interés turístico internacional lo debe tener sí o sí. Además, por una razón logística: las cofradías han aumentado sus imágenes procesionales, pero sus espacios para guardarlas son los mismos. Por ello, las tallas no siempre están en el lugar que tienen que estar, que es a la vista de la gente para que se puedan venerar y disfrutar de ellas. Creo que los diferentes actores, tanto municipales como eclesiásticos, están interesados en ello.

¿Ha pensado alguna vez en el edificio que podría dar cobijo a este museo?
 A nosotros nos gustaría que fuera la iglesia de San Francisco, un sitio céntrico, pero eso no depende de la Hermandad.

¿Y en las tallas?
No. En esto tendríamos que ponernos todos de acuerdo. Lógicamente, la idea es que haya una representación de todas aquellas cofradías que quieran estar en el museo.

¿Tiene previsto reunirse con los representantes de las instituciones públicas?
Sí. La hoja de ruta tras la elección fue la ratificación del obispo y la formación de la junta de gobierno. Los encuentros con las administraciones vendrán después.

¿Qué reclamará?
Muchas cosas. Hace falta que seamos conscientes de lo que tenemos -una Semana Santa de interés turístico internacional, repito- y que hace falta apoyarlo y que hagamos a la ciudad conocida en todos los lados por una Pasión de calidad. Las cofradías no tienen medios. Funcionan muy en precario con unas cuotas que oscilan entre 25 y 35 euros anuales por hermano y que cubren los gastos más elementales. Poco se puede hacer en este sentido por el lado de las agrupaciones. Necesitamos implicar a las instituciones en la necesidad de ayudar a las cofradías para mejorar nuestra Semana Santa, poder contratar bandas y coros, y hacerla conocer como se merece. Además, la proyección que hacen las instituciones de la Semana Santa de Palencia se queda muy corta.

¿En qué debe mejorar la Semana Santa para que sea tan famosa como la de otras ciudades cercanas como las de León, Zamora o Valladolid?
En el apoyo para darla a conocer. Tenemos maravillas de actos y de procesiones que se desconocen fuera. En Valladolid, cuando hablo a gente que tiene cierto interés en la Semana Santa y le cuento cosas que se hacen en Palencia, se sorprenden porque no lo conocen y aún más cuando vienen y ven una procesión en uno de los marcos tan bonitos que tenemos en nuestra ciudad. Tenemos que hacerlo todos. ¿Por qué no se conoce la catedral? Igual necesita también una potenciación determinada. Creo que es hora de que todos los palentinos hagamos todo lo posible para difundir las joyas de Palencia, como el románico, la seo o la Semana Santa.

¿Qué tradiciones singulares de Palencia destacaría?
Tiene un gran valor diferencial: todos los cofrades pueden participar en todas las procesiones. Esto no ocurre en la mayoría de las ciudades. Esto es un valor importante. Otro factor que hace diferente a la Pasión palentina es la diversidad de las manifestaciones procesionales. Tenemos una procesión con aires del sur, la del Viernes de Dolores que organiza la cofradía de Jesús de la Sentencia, del silencio, del dolor e, incluso, un desfile donde participan las tallas de las vírgenes de la ciudad y una función de descendimiento.

Además, existen peculiaridades palentinas como la del tararú, la llamada de hermanos o la limonada. Todas ellas conviene conservar y potenciar.

¿Es necesario incluir alguna procesión al ciclo?
No. La Semana Santa de Palencia tiene suficientes actos procesionales. Hay todos los días, desde el Viernes de Dolores.

Hace referencia a la sociedad como pilar para promocionar esta tradición, pero, realmente, ¿considera que los palentinos quieren a su Semana Santa o aprovechan que hay fiesta para hacer otros planes?
Creo que no más que en otros sitios. La excepción es Zamora, donde sí me consta que la población se queda allí durante esos días. El resto de la comunidad creo que funciona igual que Palencia.

¿Las nuevas generaciones se están implicando en las cofradías?
Sí, sin duda. Las cofradías son, por lo general, de índole muy familiar, por lo que cuando algún hermano tiene hijos le acaba trasladando la ilusión a este y lo normal es que continúe en ella. El relevo generacional está asegurado.

¿Pero dan el paso y asumen responsabilidades y cargos en las cofradías palentinas?
También. De hecho, en las juntas de gobierno de las cofradías hay gente de todas las edades.En la del Santo Sepulcro hay hermanos de 19 a 73 años.

Lo preguntaba porque se han llegado a pedir voluntarios de otras cofradías para portar pasos por falta de personas
Nos pasa en todas las cofradías. Hemos crecido en tallas y el número de hermanos no lo ha hecho proporcionalmente como la ilusión de tener nuevas imágenes. No existe esa tradición de cargar el paso como ocurre en otras partes, sobre todo en el sur, donde llega a haber listas de espera para poder entrar a llevar uno. Aquí, desgraciadamente, no es así.

La gente que no está muy ligada a la Semana Santa quizá desconozca, como ya ha explicado, que la actividad de una cofradía se extiende a todo el año. ¿Qué actividades promueven?
Muchas de las cofradías tenemos más advocaciones. Por ello, hacemos otra serie de actos religiosos y otras actividades destinadas para gente joven, de acción social o la ruta Belén a Belén o el Corpus. Hay muchos momentos cofrades a lo largo del año. La iglesia no cierra por vacaciones y nosotros estamos ligados a ella.

¿La participación es igual, mayor o menor que en Semana Santa?
Indudablemente, es menor. El momento álgido de todas las cofradías es la Pasión.

Dentro de cuatro años, cuando concluya este mandato, ¿cómo querría que estuviese la Hermandad de Cofradías?
Espero encontrarla con un mayor valor y que la junta de gobierno y yo hayamos podido aportar algo más a la Semana Santa y a la ciudad de Palencia

Para concluir, no sé si podría explicar cuál es su momento preferido de la Semana Santa.
Para mí hay un momento especial que seguro comparto con todos los cofrades y es en el que nuestras imágenes entran en capilla al terminar la procesión. Es un sentimiento de emoción complicado de explicar. Hablo de emoción, no estética.

Momentos estéticamente bellos hay más de uno cada día, desde el Viernes de Dolores hasta el Domingo de Resurrección.