El Quesos Cerrato Palencia logró ayer buena victoria en su visita a la cancha del Peñas Huesca, que le deja a falta de una más, el domingo que viene ante el Coruña, para volver a disputar una Copa Príncipe. Los hombres de Natxo Lezkano, algo imprecisos en la primera mitad, mejoraron tras el descanso para mantenerse en lo más alto de la tabla.

El Peñas Huesca salió a la pista algo frío y eso permitió que el Quesos Cerrato empezara con un parcial de 0-4, pero los aragoneses pronto se metieron en el partido y no dejaron a los palentinos abrir más brecha en el marcador.

A partir de ahí, la igualdad fue la tónica dominante de la primera parte. Los visitantes movían bien el balón de fuera hacia dentro, aprovechando su superioridad en la pintura para anotar, pero pronto empezaron a abusar del tiro exterior, donde no estaban acertados y debido a ello, el Peñas Huesca, que buscaba romper la defensa morada con constantes penetraciones y mostraba más puntería desde el perímetro, lograba mantenerse pegado en el marcador.

Además, el Palencia no cerraba bien el rebote y aunque el pívot nigeriano Orukpe no acababa de aprovecharlo, las segundas opciones locales eran demasiadas. A falta de tres minutos para finalizar el cuarto, los visitantes dispusieron una defensa zonal que no acabó de funcionar para frenar a los oscenses, terminando el primer cuarto con un ajustado 18-19.

En el segundo cuarto, el Quesos Cerrato Palencia siguió pecando de los mismos errores. Demasiados tiros desde el perímetro que no entraban y un déficit en el rebote defensivo. Por suerte para ellos el Peñas Huesca tampoco se mostró muy acertado de cara al aro y la igualdad siguió reinando en el marcador, cruzándose los quince minutos de juego con el 25-26 en el electrónico.

La primera mitad iba llegando a su fin y los morados parecían dar un pequeño arreón. Primero con una canasta de Arteaga que ponía el 31-34 y, a continuación, un robo de balón de Xavi Forcada le permitió una canasta fácil que ponía la máxima diferencia en el marcador hasta el momento (31-36). Pero el Huesca no falló en el siguiente ataque y Lezkano pidió un tiempo muerto, a falta de 15 segundos para el descanso. La jugada de pizarra no funcionó y la primera mitad acabó 33-36.

El descanso le sentó bien al Quesos Cerrato, que pareció encontrar su puntería desde el perímetro. Dos triples de Cortaberría y Forcada y otra canasta de Forcada marcaron un parcial de 0-8 que despegaba a los palentinos en el marcador (33-44). Además, los hombres de Lezkano subieron la línea defensiva, dificultando mucho más el ataque de un Huesca que empezó a ofuscarse y los visitantes se fueron más allá de los diez puntos.

Sin embargo, el Peñas Huesca no tiró al toalla y siguió peleando, pero cada vez que tenía la oportunidad de bajar de la barrera psicológica de los diez puntos se precipitaba en el tiro, desperdiciando su oportunidad. Finalmente, los oscenses lo lograron a falta de un minuto para el final del tercer periodo con dos tiros libres que Brizuela transformó. Pero la respuesta rival fue rápida y fulminante. Un dos más uno sobre Hampl y un triple de Dani Rodríguez daban un colchón de 14 puntos a los visitantes al final del tercer cuarto (50-66).

El último cuarto apenas tuvo historia. El Peñas Huesca, a la desesperada, intentó recortar distancias en el marcador sin demasiada suerte, ya que o se precipitaban en el tiro o se ofuscaban ante la buena defensa morada que apenas dio opciones a los verdes. Así fueron pasando los minutos, en un tira y afloja en el que los jugadores del Quesos Cerrato Palencia supieron gestionar su ventaja para no pasar apuros y llevarse la victoria del Palacio Municipal de los Deportes de Huesca.