170 horas al año para cada usuario de ayuda a domicilio

Rubén Abad
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La prestación llega a 1.980 personas, a las que se ha atendido desde el 1 de noviembre de 2020 durante un millón de horas. La dotación económica del contrato, el más alto de la institución, asciende a 27,3M€

170 horas al año para cada usuario de ayuda a domicilio - Foto: Jesús J. Matías

El servicio de ayuda a domicilio de la Diputación se ha consolidado como uno de las principales salvaguardas de los intereses de los habitantes del medio rural, pues contribuye a mejorar enormemente la autonomía personal y la calidad de vida de los  mayores en sus propios domicilios.

La prestación llega a 1.980 usuarios (1.825 en 2021), a los que se ha atendido durante un millón de horas en los tres últimos años, desde la firma del actual contrato con la unión temporal de empresas integrada por ONET Ibérica Soluciones y Clece. Dicho de otra forma, se atiende a la población equivalente de Paredes de Nava con una media de unas 170 horas cada año por usuario.

Respecto al perfil de los usuarios, el 93,33 por ciento son personas de avanzada edad con dificultades en su autonomía personal y en condiciones de desventaja social. El 67,07 por ciento son mayores de 80 años, el 5,15 por ciento tiene más de 65 años y el 27,78 tienen edades comprendidas entre los 65 y 80 años. Además, los usuarios son mayoritariamente mujeres, el 68 por ciento.

Cabe destacar también que un 5,51 por ciento son personas con discapacidades que afectan significativamente a su autonomía personal.  Los menores de edad cuyas familias no pueden proporcionarles el cuidado que requieren en su domicilio suponen el 0,35 por ciento. 

El objetivo es ayudar a los usuarios a realizar las tareas básicas de la vida diaria, prevenir el deterioro personal o social y promover condiciones favorables en las relaciones familiares y de convivencia. En definitiva, contribuir de manera efectiva a la integración y permanencia de las personas en su entorno habitual de vida mediante la adecuada intervención y apoyos de tipo personal, socio-educativo, doméstico y social.

En este contexto, la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén, recordó que «las personas están en el epicentro de todas las políticas del equipo de Gobierno de la institución provincial, que tienen entre sus objetivos garantizar la igualdad de oportunidades». Dicho de otra forma, «más de 27 millones de euros para que nuestros vecinos vivan mejor allí donde quieren, que es en sus casas y en sus pueblos», remató.

SERVICIOS PRESTADOS

La ayuda a domicilio se gestiona a través de los once Centros de Acción Social (CEAS) que tiene la Diputación repartidos por la provincia y que hacen que sea posible que este servicio llegue a todos las localidades del territorio. Esta se presta todos los días del año en horario de mañana y tarde, pudiendo incluir festivos de 7 a 22 horas.
En relación a las mejoras, productos de apoyo y servicios complementarios ofrecidos por la empresa, desde el año de inicio del contrato se han cubierto de forma casi total la prestación de todos los productos tanto para atención a inmovilizados (grúas, camas articuladas, colchones antiescaras…) como para apoyo en las tareas de higiene (sillas de baño, alzadores de inodoros…).

La evolución de prestación de servicios de apoyo y promoción personal se han ido incrementando atendiendo a un mayor número de personas a lo largo de los años para cubrir la demanda («no hay lista de espera», subrayó Armisén). Estos servicios atienden una gran variedad de situaciones y opciones,  y no tienen coste alguno para el usuario.
Así, los servicios a domicilio podología se ha triplicado entre 2021 y 2023 y el de peluquería se ha duplicado. También tienen un peso específico los servicios de estancia temporal en residencia, que han pasado de cinco estancias en 2021 a 45 en 2023. Este está dirigido a personas que tras un ingreso hospitalario no pueden volver a su domicilio con plenas garantías de atención.

Otra de las áreas que se presta es la rehabilitación y apoyo en el domicilio que incluye de rehabilitación física y terapéutica, la atención psicológica y estimulación cognitiva. En algunos casos, como la rehabilitación física, han llegado a  agotarse las 600 horas establecidas.

Las 441 personas que trabajan como auxiliares son mujeres. De esta manera, se evitan situaciones de exclusión social y laboral, y se favorece la igualdad de oportunidades.

El número se ha incrementado en el período de vigencia del contrato un 8 por ciento. Ese aumento ha ido paralelo a la subida de usuarios y de las  horas prestadas.