Un total de 41 municipios del Cerrato palentino se adhirieron al modelo Atención en Red de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta, con una inversión de nueve millones de euros y una previsión que estima la creación de 100 puestos de trabajo directos en esta comarca del medio rural, en la que se verán beneficiadas un total de 240 personas.

La responsable de la cartera, Isabel Blanco, subrayó que se trata de un proyecto innovador, paradigma del sistema de atención a la Dependencia 5.0, que tiene como finalidad ofrecer cuidados individualizados a las personas mayores con dependencia, discapacidad o enfermedad crónica, ya sea en centros residenciales o en su propio domicilio.

De esa forma, de los nueve millones de euros de inversión para la comarca palentina, siete irán destinados a la prestación de los servicios, de la mano de la Fundación San Cebrián. El resto se destinará para adaptar y adecuar las viviendas. Explicó que se trata de que las personas mayores «que quieran y puedan quedarse en su domicilio reciban los servicios a través de la entidades colaboradoras, así como que se proceda a la modernización y adaptación de las viviendas». 

Es decir, en los propios domicilios del usuario, así como aquellas otras viviendas de titularidad municipal que sean puestas a disposición del programa para que ciertas personas puedan volver a su municipios en condiciones óptimas. «El objetivo es proteger a las personas más vulnerables y ofrecerles lo que ellos reclaman, que es poder quedarse en su casa con todos los cuidados como si estuvieran en un centro residencial», destacó Blanco.

Pilares del proyecto. El germen del proyecto nació en Ávila, pero el objetivo del Gobierno autonómico y de su presidente, Alfonso Fernández Mañueco, era que llegará al resto de la Comunidad, motivo por el que se ha ido extendiendo por Salamanca, Zamora, Burgos y Palencia, con la comarca del Cerrato, recordó.

Este proyecto es el «eje principal de la modernización de los servicios sociales» que se está emprendiendo durante esta legislatura, con una adaptación a la Dependencia 5.0. Es decir, trata de combinar lo ya existente.  La Atención en Red pivota sobre tres ejes, complementarios entre sí: A gusto en casa, Viviendas en Red y el nuevo modelo de atención residencial. 

En los dos primeros, el usuario recibe servicios de calidad en su propio entorno, permitiendo así que pueda permanecer en su hogar de forma digna y segura hasta el final de su vida.

El tercero emerge de la transformación de las residencias, al amparo de una ley autonómica en fase de tramitación, que además de acomodar su diseño al formato de unidades de convivencia que replican el tamaño y el ambiente del hogar familiar, promueve centros multiservicio. Dicho de otro modo, a sus instalaciones de comedor o lavandería o a sus servicios de promoción de la autonomía tienen acceso los usuarios de A gusto en casa y Viviendas en Red. Por lo tanto, la Atención en Red conjuga los cuidados en domicilio y en centros residenciales, y los conecta entre sí por medio de un paquete común de productos tecnológicos y servicios de apoyo, por un lado, y una red de profesionales, por otro.

Apoyo vital. Por su parte, la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén, señaló que se trata de un programa que excede de lo que es proyecto local, el cual va a poder desarrollar ese servicio por encima de los 40 municipios de la comarca palentina. Agradeció a Blanco y a la Junta la puesta en marcha de actuaciones que «solventan las necesidades que se van detectando a lo largo del territorio». 

Armisén, acompañada de la alcaldesa de Baltanás, María José de la Fuente, apuntó que se trata de una experiencia piloto que se pondrá en marcha en otras tres provincias más, pero que «está abocada al éxito». Un programa que se lleva a cabo gracias a la coordinación entre administraciones como son los Servicios Sociales que, desde la Junta, se despliegan en el territorio a través de las diputaciones y los ayuntamientos, agregó.