Valdebebas y se acabó

David Correia
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El Club Internacional de la Amistad se mide mañana al Real Madrid en el último duelo liguero

Valdebebas y se acabó - Foto: Sara Muniosguren

Quién hubiera dicho a principio de temporada que el Club Internacional de la Amistad llegaría a la última jornada de liga con toda la tranquilidad del mundo. Y menos mal, porque enfrente estará un Real Madrid que todavía no ha perdido esta campaña.

El CIA consiguió el fin de semana pasado un triunfo histórico. Con su contundente victoria ante la Cultural y Deportiva Leonesa, el equipo de Manu Gañán certificó su permanencia en la División de Honor juvenil, la máxima categoría del fútbol nacional a esta edad. 

Los goles de Mario Vallejo, Bruno y Viti valieron su peso en oro, y es que nunca antes otro equipo de la provincia había conseguido mantenerse en División de Honor juvenil.

La victoria del CIA sobre la Cultural no solo certificó la salvación de los palentinos, sino también el descenso de los leoneses, que no pudieron mantener la categoría. Así, la liga en el grupo V ya está decidida. El Real Madrid es el campeón. Los blancos tienen 81 puntos, mientras que su principal perseguidor, el Atlético de Madrid, tiene 78. Si el CIA gana mañana (12 horas) en Valdebebas y el conjunto colchonero hace lo propio ante el Rayo Vallecano, los rojiblancos empatarían a puntos con los merengues, pero el Real Madrid tiene el golaveraje ganado después de su victoria (5-0) sobre la escuadra dirigida por Fernando Torres. Así que, pase lo que pase, los de Arbeloa son campeones de liga.

Por debajo también está todo el pescado vendido. Badajoz, Diocesano, Sporting Hortaleza y Cultural Leonesa descienden de categoría. Con 24 puntos, la Cultu no puede llegar a los 29 que tiene el Villanovense, quien marca la permanencia. Así, los extremeños ya están salvados, igual que el CIA, que tiene 31.

PUNTO FINAL. Con la tranquilidad de quien ya ha hecho sus deberes, el CIA pone mañana el broche al curso. Lo hará ante el Real Madrid en Valdebebas. Un partido precioso para terminar una fantástica campaña.