"Pedimos que se quite el IVTM a los coches realmente clásicos"

César Ceinos
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El Club 600 de Palencia y Amigos de los Clásicos está formado por 136 socios, 16 más que en 2019, cuando asumió Ricardo García Villacorta el cargo de presidente. Explica que en los últimos años están en auge las concentraciones en pueblos

Ricardo García - Foto: Sara Muniosguren

El Volkswagen Escarabajo, el CitroënTiburón, el Renault 11 Ligero y, por supuesto, el mitiquísimo Seat 600, el coche que motorizó España a mediados del siglo pasado,  son algunos de los vehículos que dejaron huella en muchos palentinos, que, en algunos casos, los rescataron de la chatarra para darles una segunda oportunidad. Uno de ellos es Ricardo García Villacorta (Tarilonte de la Peña, Santibáñez de laPeña, 1951), el presidente del Club 600 Palencia y Amigos de losClásicos desde 2019.

¿Cómo entró a formar parte del club que preside en la actualidad?

Entré en 2011. Adquirí un Citroën 2CV en mal estado y lo restauré. Me quedó muy bonito y me llevé una gran alegría. A raíz de ahí me apunté al club, que por aquel entonces estaba encabezado por Ángel Zamora, al que sucedí en el cargo.

¿Qué balance hace del mandato?

Ha habido de todo en estos cuatro años, incluso una pandemia de por medio que nos obligó a suspender las actividades. Recuerdo que la primera salida que organizó el club en la desescalada fue una excursión a Ruesga en la que comimos el bocadillo que llevábamos nosotros en el campo. Tuvimos muchísimo cuidado. De estos cuatro años me quedo, prácticamente, con todo.Tenemos una sede propia en la que guardamos los trofeos y detalles que conseguimos en las concentraciones. Anteriormente utilizábamos la nave de un amigo y estábamos un poco de prestado. También ha aumentado el número de socios, que pasaron de 120 a 136.En estos años se han producido altas y bajas, pero el número total ha crecido. Tras la covid-19, la gente se ha animado y hay muchas concentraciones en los pueblos. Además, salen muchos más participantes.

¿Cómo ha cambiado la actividad del club en las últimas décadas?

Ahora se organizan muchas concentraciones de vehículos clásicos en pueblos y ciudades, mientras que antes era más familiar.Es decir, las salidas las organizaba el club y nos desplazábamos a visitar monumentos. En estos momentos, nos avisan de localidades, donde pasamos el día y nos invitan a comer. Vamos a los pueblos y nos dan ambiente. Encuentros como el de Paredes de Nava o Cevico de laTorre son ya habituales.

¿Qué perfil tiene el socio?

El de una persona mayor que entiende de mecánica. Y, si no sabe, acaba entendiendo. Jóvenes hay pocos.

Se considera vehículo clásico a todo aquel que tenga más de 25 años, lo que facilita que aumenten cada temporada. ¿Se ha perdido la esencia?

Un poquito sí que se ha perdido. Las concentraciones se llenan, en ciertas ocasiones con coches más actuales que tienen más de 25 años, pero que, para mi gusto, no dicen nada.

¿Reciben ayuda de las instituciones públicas?

El Consistorio, todos los años, nos  concede una subvención para la concentración de SanAntolín. En las pasadas fiestas ascendió a 1.500 euros. Hubo un total de 193 vehículos registrados.

¿Y tienen reclamaciones que lanzar al Ayuntamiento?

Hace dos años empezaron a cobrarnos el 50% del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) en la capital.Estamos pendientes de la tramitación de modificación la ordenanza para solicitar el descuento del 100%. El anterior alcalde, Mario Simón, dijo que iba a intentarlo.Hemos vuelto y Miriam Andrés nos ha dicho que estemos pendientes de alegar.

¿Por qué piden no pagar nada de IVTM?

Porque andan muy poquito. Nuestra petición será que quiten el impuesto a los realmente clásicos, de más de 30 o 35 años.Si los de 25 andan todos los días por la calle, quizá lo tengan que pagar.

¿Creen que tiene que haber algún cambio en el aspecto legal respecto a los coches clásicos?

A veces, desde la InspecciónTécnica de Vehículos (ITV) no tratan de manera adecuada los coches con 50 o 60 años. Un Seat 600 sufre mucho cuando lo meten en los rodamientos de freno. Sufren muchísimo en la revisión cuando, en realidad, no los usamos muchas veces al año. No son coches como los de ahora.