Ninguna sorpresa en la última sesión plenaria de las Cortes antes del verano. El minidebate de política general planteando por el Partido Socialista terminó en un cruce de acusaciones de electoralismo, reproches y eslóganes desde ambos lados del hemiciclo. Precisamente, la proximidad con el 23-J y su influencia sobre el debate de política general de Castilla y León fue el argumento esgrimido por el presidente de la Junta, para aplazar hasta después de los comicios la celebración del mismo. Un cambio de fecha que sirvió para que ayer, una vez más, los socialistas tacharán de «cobarde» al dirigente autonómico. El minidebate se articuló a través de dos proposiciones no de ley, que recogían tanto medidas como incumplimientos de todas las consejerías de la Junta y que fueron rechazadas por los socios de Gobierno, PP y Vox, que avisaron de que, si llegan a La Moncloa el próximo 23 de julio, derogaran todas las leyes «ideológicas» del Gobierno de Pedro Sánchez.
La procuradora socialista Rosa Rubio fue la encargada de presentar la incitativa, y comparó las medidas económicas y sociales del Gobierno de España con la ausencia de las mismas por parte de la Junta, gobernada por PP y Vox, a los que acusó de recortar derechos. «Siento vergüenza de la falta de respeto a los problemas de los castellanos y leoneses», manifestó Rosa Rubio, que advirtió de que no les van a sacar de las calles y se mostró convencida de que no van a derogar las leyes porque volverá a ganar el PSOE, «el progreso y la dignidad».
A la critica se sumaron Pablo Fernández (Podemos) y Francisco Igea (Cs), que lamentaron «la degradación de la democracia» en Castilla y León. El morado calificó de «circo» la actitud de PP y Vox en las Cortes y el liberal atacó al presidente de la Cámara, Carlos Pollán, al que tachó de «cancerbero de tres cabezas».
El debate subió de tono en el turno para fijar posición por parte de los grupos de Vox y Popular. David Hierro criticó la iniciativa del Grupo Socialista como «acto electoral» y De la Hoz desacreditó las 94 propuestas por ser repetidas, tras su rechazo, y por su presentación incluso «con faltas de ortografía».
El popular defendió que han hecho bien en retrasar la sesión de política general a un momento «más sosegado», como septiembre, porque consideró que el PSOE la quería utilizar para «salvar al soldado Sánchez» y otros, en referencia a los minoritarios, «para tener su minuto de gloria con insultos». De la Hoz (PP) y Hierro (Vox) coincidieron en que si sus partidos llegan a La Moncloa tras las próximas elecciones van a derogar «todas» las leyes ideológicas, donde el primero se refirió a la de Memoria Histórica, Trans o Vivienda. «Si las vamos a derogar, vamos a derogar la mentira, el engaño y la soberbia, vamos a derogar el sanchismo», zanjó el popular con la bancada de su grupo en pie aplaudiéndole.