El carácter seco y caluroso de las primeras semanas de la campaña de riego ha provocado que «todos» los sistemas de explotación de la cuenca del Duero hayan comenzado el descenso en sus reservas, según los datos que maneja la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD). En concreto, en los últimos siete días las reservas han disminuido en 8,3 hm3 en el sistema Carrión y en 4,5 hm3 en el del Pisuerga, 40 hm3 en el conjunto de embalses gestionados por la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD).
En este contexto, unas precipitaciones de importancia en el mes de mayo serían «fundamentales para que la campaña pudiera desarrollarse con mayores garantías en todos los sistemas de explotación», señala el organismo de cuenca. Recuerda, además, que la normativa general y el Plan Hidrológico sitúan al abastecimiento de la población como el uso con «preferencia absoluta».
Con este panorama como telón de fondo, la CHD se reunió ayer con los regantes de los sistemas Carrión y Pisuerga-Bajo Duero para evaluar el inicio de la campaña de riego. Estas sesiones de las Juntas de Explotación forman parte de la apuesta del ente público por mantener un contacto permanente con las comunidades de regantes, en una campaña «marcada por la escasez de precipitaciones durante el final del invierno y la primavera».
UPA PALENCIA
UPA Palencia considera «límite» el panorama del campo con una sequía que está dejando los cultivos en una situación «dramática» ante la ausencia de lluvias, la poca cantidad de agua embalsada y los «escasos» hectómetros cúbicos de riego asignados». Ante un año «tan crítico», la opa considera que la solución pasa por la «máxima eficiencia» y la «gestión responsable» del agua en función del ciclo de los cultivos.
Por otro lado, considera que la situación actual deriva de la «dejadez política» y del «escaso compromiso» que han demostrado la administración. «Lo demuestra el hecho de que Palencia es la provincia de Castilla y León en la que menos han aumentado las hectáreas de regadío en la última década. A pesar de que somos la segunda provincia con más superficie regable, sin embargo somos la última en modernización», pone de manifiesto su secretario general, Blas Donis.
«La agricultura competitiva y moderna palentina pasa por realizar las pertinentes obras para la construcción de una infraestructura de regadío que mejore la distribución del agua, logrando que sean más responsables medioambientalmente hablando y más competitivas las explotaciones», concluye Donis.
Recuerda que el sistema Carrión tiene unas 50.000 hectáreas de regadío y «cero superficies modernizadas». En el Pisuerga se disponen de unas 8.000 hectáreas modernizadas de las 20.000 disponibles. «En total, de unas 70.000 hectáreas de regadío, apenas hay 10.000 hectáreas modernizadas», remata el líder de UPA.