El proyecto del itinerario peatonal accesible en el ámbito de las riberas urbanas del río Carrión parece gafado. Primero fue su errada planificación, que obligó al anterior equipo de Gobierno a replantear las obras después de que la Confederación Hidrográfica del Duero no autorizase la actuación por considerar que alteraba el cauce del río Carrión, producía la desnaturalización del borde del Carrión e incrementaba el riesgo de inundación.

Cuando el Ayuntamiento recortó el proyecto y lo ajustó a las normas de la CHD, se percató de que  estaba a punto de caducar los plazos marcados para licitar las obras y, con ello, de perder la financiación europea que sufraga los 865.986 euros en los que está valorada esta actuación. 

Gracias a la rápida actuación de la nueva Corporación, la Junta de Gobierno Local aprobó el pasado 7 de julio, por procedimiento de urgencia, el pliego del proyecto. Una licitación -y aquí está su tercer traspiés- que ha quedado desierta porque ninguna empresa se ha interesado por este contrato. 

El concejal de Urbanismo, Álvaro Bilbao, asegura que el principal motivo de ese desinterés ha sido la dificultad de llevar a cabo la actuación en el escaso plazo que marcó el Ayuntamiento. «Las obras debían  estar terminadas el 30 de noviembre y tras consultarlo con varias empresas, todas han coincidido en señalar que uno de los aspectos de la actuación impide terminarlas en plazo». El concejal se refiere al arreglo de las pasarelas del Sotillo y de Isla Dos Aguas y, en concreto, al arreglo de sus barandillas.

El molde de esas barandillas está en Burgos y, según explicaron las empresas al Ayuntamiento, la única forma de que la actuación sea rentable económicamente es enviarlo a China y realizar allí la fundición. «En cuatro meses no es posible hacerlo», asegura el edil.    

El hecho de que la licitación haya quedado desierta hubiese supuesto para la ciudad renunciar a una inversión de casi 870.000 euros porque no habría materialmente tiempo disponible para volver a sacarla a licitación, adjudicarla y llevarla a cabo antes del 30 de noviembre. Sin embargo, y en eso sí ha tenido suerte el Ayuntamiento, el Gobierno informó este mismo mes a los consistorios de que  las obras vinculadas a ayudas con fondos europeos Next Generation que se concedieron para la implantación de zonas de bajas emisiones tendrán un plazo de un año más para poder ejecutarse. 

El Consistorio ha solicitado la prórroga y está a la espera de que se conceda, por lo que tendrá hasta el 30 de noviembre de 2024 para retocar los pliegos, conseguir que sean más atractivos para las empresas y volver a licitar, sin prisas y con plazos más amplios, las obras de este proyecto. «Será a principios del próximo año y daremos siete meses para ejecutar las obras», asegura Álvaro Bilbao.

El concejal de Urbanismo descarta incrementar el presupuesto disponible para acometer esta actuación, por lo que volverá a licitarse en 865.986 euros. 

El proyecto. En concreto las obras del itinerario peatonal accesible en la ribera del río Carrión, en el tramo comprendido entre el paseo de la Julia y El Sotillo tienen como objetivo principal garantizar para las personas la accesibilidad de todo el circuito biosaludable existente en la margen izquierda del río y en Isla Dos Aguas, así como separar e independizar las sendas peatonales y ciclistas, sobre todo en el tramo entre el parque de las Huertas del Obispo y el Puente Mayor.

El proyecto también plantea la mejora de la pasarela peatonal de acceso a la Isla Dos Aguas desde el paseo de la Julia, así como las dos que conectan el Sotillo con Huertas del Obispo, ya que las tres  tienen sus pavimentos muy deteriorados y sufren los efectos de la corrosión.

De una forma más concreta, el proyecto, en primer lugar, contempla la construcción de una rampa accesible desde la avenida de Castilla, a la altura de la iglesia de San Miguel, que permitirá comunicar la margen izquierda del río con el parque de Isla Dos Aguas. 

De hecho, ahora mismo solo hay dos rampas accesibles a las riberas: la de Puentecillas y la de la avenida de Santiago Amón. Con esta actuación se logrará una tercera en una zona intermedia del recorrido. 

La segunda actuación consistirá en la modificación de las rampas de acceso a la ribera para desdoblar el tráfico peatonal y el de bicicletas a uno y otro lado de Puentecillas. Se trata de ensanchar las rampas actuales desde la avenida de Castilla para separar la zona de peatones y la de bicicletas. 

La tercera parte de las obras consistirá en la mejora de la pasarela peatonal de acceso al parque Isla Dos Aguas desde el paseo de la Julia. Diario Palentino ya ha recogido en sus páginas en varias ocasiones el deteriorado estado de este acceso sobre el río. Para solucionar el problema, el proyecto contempla un pavimento de tarima para exterior. Además, se limpiará la pintura y la corrosión existente en sus barandillas.

También se actuará en las pasarelas peatonales de acceso al Sotillo, cuyo pavimento se encuentra cuarteado y desprendido. Se aplicará el mismo tratamiento que en la de Isla Dos Aguas, además de reparar, por fin, el tramo de barandilla dañado por la caída de un árbol.

Y, por último, el proyecto contempla la reforma del acceso a la ribera izquierda desde el puente de Hierro, que, en la actualidad, consiste en una escalera de 1,50 metros de anchura. Además, se eliminará el desnivel de 30 cm que existe en la avenida de Santiago Amón.