Cerca de 1.400 ovejas merinas procedentes de Extremadura fueron descargadas ayer en San Cebrián de Mudá. Los animales, con sus correspondientes mastines y pastores, pasarán el verano en los pastos y las brañas del norte de la pronvicia. Diferentes localidades de la Montaña Palentina y entidades como la Reserva del Bisonte Europeo colaboran con la trashumancia desde hace varios años.
Foto y vídeo: Jesús González