Un juez federal estadounidense declaró ayer inconstitucional la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible (ACA), más conocida como Obamacare, que era el legado más preciado de la Presidencia de Barack Obama (2009-2017). Su derogación fue una de las promesas de campaña del actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

La decisión del magistrado Reed O’Connor, que deja en el limbo la cobertura médica de unas 20 millones de personas, llega después de que el Congreso modificara hace unos meses de forma parcial esta norma, promulgada en 2010, en el marco de la reforma fiscal promovida por Trump. «Obamacare acaba de ser declarado inconstitucional por un juez muy respetado en Texas. ¡Una gran noticia para Estados Unidos!», reaccionó en Twitter.

Hasta su implantación, las aseguradoras podían subir los precios de los seguros médicos en función de las enfermedades de los clientes, una lógica que arruinaba a miles de familias. 

Con su promulgación, la ley exigía a la mayoría de los adultos que estuvieran cubiertos por un plan de salud, arriesgándose, en caso contrario, a ser penalizados con una multa. Así, el fallo del togado responde a una demanda que interpusieron una veintena de estados republicanos tras la aprobación de la reforma fiscal, con la que se eliminaron dichas sanciones, conocida como mandato individual.