El objetivo de la cita previa es optimizar la accesibilidad a la consulta de Atención Primaria, algo que el ciudadano puede hacer a través de tres canales: telefónico (IVR o teleoperador), Internet y aplicación móvil (Android e IOS). Esta última cada vez tiene un mayor peso, extremo del que da cuenta que en 2018 el 28,44% de las peticiones se realizó por esta vía (222.272 de las 781.367 contabilizadas), casi cuatro puntos más (24,24%) que en 2017 (178.676 de 737.09). El porcentaje es unas décimas inferior a la media regional (28,60%), con estadísticas como las de Valladolid Oeste (38,25%) y Zamora (30,16%) o Segovia (17,08%).
La app, que el Sacyl puso en marcha a finales del 2013, permite al usuario solicitar, consultar y anular una cita con los profesionales de su centro de salud, elegir el horario que mejor se adapte a sus necesidades e integrarla en su calendario personal. Mediante esta aplicación, el ciudadano concertará citas de demanda para las diferentes categorías profesionales habilitadas. Y en una misma operación podrá añadir al calendario de su teléfono un aviso para recordarle la cita que ha concertado. Además, el paciente podrá consultar las citas pendientes que ya tiene programadas, así como cancelar aquellas a las que no pueda acudir. Para una mayor comodidad y facilidad de uso, el usuario tiene la opción de guardar en su móvil los datos de varias tarjetas sanitarias (por ejemplo la suya, la de sus hijos o la de personas mayores que tenga bajo su cuidado) y elegir de manera muy sencilla con cuál de ellas quiere gestionar una cita. También permite la posibilidad de ver detalles del profesional asignado, el lugar al que acudir a consulta o sala. Asimismo, esta aplicación para móviles dispone de un buscador de centros de salud desde el que se podrá localizar la dirección de un centro, ver mediante mapas como llegar hasta él o contactar telefónicamente con el mismo y con el servicio de urgencias correspondiente a ese centro.