La Junta ha emitido un informe de impacto medioambiental favorable para un proyecto de ampliación de una explotación porcina en Guardo promovido por la firma Deporcyl para una capacidad de 7.200 cerdos.
Según el informe al que ha tenido acceso Diario Palentino, el proyecto no se encuentra en zona designada como vulnerable a la contaminación de las aguas por nitratos procedentes de fuentes de origen agrícola y ganadero.
El proyecto consiste concretamente en la ampliación de una explotación porcina de cebo de 1.999 plazas hasta 7.200 cerdos, que promueve la empresa Desarrollos Porcinos de Castilla y León SL (Deporcyl SL). La granja se ubicará en una parcela, con una superficie de 70.101 m2, clasificada como suelo rústico común, situada en el paraje conocido como Matalebreras.
La explotación porcina tiene cinco naves de 1.631,66 m2 y 1.440 plazas de cerdos de cebo cada una de ellas. Además, el complejo ganadero contará con instalaciones auxiliares para el manejo de la explotación: Edificio para servicios (76,60 m2); lazareto (189,13 m2); grupo electrógeno; cinco silos de pienso; fosa de purín de 8.087 m3; vallado perimetral; abastecimiento de agua por sondeo en la propia finca; y equipo portátil de desinfección. La superficie total construida será de 8.424,02 m2.
La actividad a desarrollar por la empresa consistirá en el cebo de lechones procedentes de otras explotaciones porcinas. Los lechones entrarán en la explotación con 20 kg de peso vivo para ser cebados hasta alcanzar 100 kilogramos durante aproximadamente 15 semanas. Entre ocupación y ocupación se realizará un período de vacío sanitario de 7 días, período en el cual se llevará a cabo la limpieza y desinfección de los parques. Hay que incidir en que el ciclo completo tiene una duración aproximada de 112 días.
Por otro lado, la explotación producirá anualmente 15.480 m3 (13.932 t) de purines, que serán almacenadas en el exterior de la instalación en una fosa de 8.087 m3, con capacidad para 6,26 meses de producción. Estos residuos serán gestionados mediante valorización agrícola en las parcelas disponibles para ello, habiendo justificado 141,19 hectáreas.
Las aguas residuales producidas se canalizarán hacia la fosas de purines. En cuanto a la producción de residuos y subproductos animales, la explotación contratará gestores autorizados para la retirada de cadáveres, para la recogida de los residuos de tratamientos zoosanitarios y para los generados en el desarrollo de la actividad.
El informe de impacto medioambiental mantiene que no existe coincidencia geográfica del proyecto con ningún espacio incluido en el Plan de Espacios Naturales Protegidos de Castilla y León, ni con la Red Natura 2000, ni se prevé la existencia de afecciones indirectas, ya sea individualmente o en combinación con otros, que pudieran causar perjuicio a la integridad de cualquier lugar incluida en aquélla.