La presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén, suscribió ayer convenios de colaboración con 18 ayuntamientos para la continuidad del programa Crecemos, cuyo objetivo es facilitar la conciliación de la vida familiar y laboral en el ámbito rural y que se incluye dentro del acuerdo marco de cofinanciación que la institución provincial suscribe con la Junta.

La cuantía global que se reserva para Crecemos, que da servicio a 253 niños de entre 0 y 3 años, alcanza los 256.509 euros. De esta cantidad, la administración regional aporta 171.006 euros anuales y la Diputación los 85.503 restantes.

Los municipios incluidos son: Alar, Ampudia, Astudillo, Barruelo, Báscones, Cisneros, Frómista, Monzón, Osorno, Salinas, Torquemada, Villada, Villarramiel y Villaumbrales (Cascón de la Nava), con una unidad cada uno de ellos. El programa también se extiende a Baltanás, Herrera, Magaz y Paredes, localidades estas que mantienen dos unidades.

En representación de todos ellos tomó la palabra el alcalde de Magaz, Luis Alonso, quien aseguró que sin la ayuda de la institución provincial «los pueblos pequeños no podrían contar por sus propios medios con este programa que tanto ayuda a las familias».

El pasado ejercicio se atendió a través de este programa a 253 menores de la provincia (un incremento del 3,2 por ciento respecto al año anterior), con una media de 11 niños por centro. En el 65,6 por ciento de los casos, trabajaban ambos progenitores. Además, es un generador de empleo en el medio rural, con 31 técnicos contratados en 2018.

servicio bien valorado. Armisén dijo del programa que «es uno de los servicios más valorados por los ciudadanos de la provincia y los ayuntamientos». Por su parte, la diputada de Servicios Sociales, María José de la Fuente, lo definió como una de las «grandes» apuestas de la institución provincial «porque da cobertura a las necesidades de la gente, y por eso está tan bien valorado». Además, lo puso como ejemplo de «colaboración entre administraciones».