La catedral acogió ayer el Vía Crucis de anuncio del camino cuaresmal, organizado por la Hermandad de Cofradías Penitenciales de Semana Santa, con la salida extraordinaria de Nuestro Padre Jesús Crucificado y Nuestra Señora del Perdón. 

La imagen de Jesús Crucificado, de Alejo de Vahía, salió acompañada por la cofradía de la que es titular y por Nstra. Sra. de La Soledad, Santo Sepulcro y Jesús de la Sentencia, para llegar a la catedral por la plaza San Francisco, Ignacio Martínez de Azcoitia, Mayor Principal, Barrio y Mier, Juan de Castilla, Jorge Manrique y plaza de la Inmaculada. 

Por su parte, Nuestra Señora del Perdón, de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia, salió acompañada de esta, la Santa Vera Cruz, Jesús Nazareno, Jesús de Medinaceli y  Virgen de la Piedad con dirección a la catedral por plaza de Isabel la Católica, Menéndez Pelayo, Juan de Castilla, Jorge Manrique y plaza de la Inmaculada.

Una vez dentro de la seo, las imágenes fueron colocadas en el pasillo de la entrada: la Virgen en la IV estación (Jesús se encuentra con su Madre), y el Cristo en la I  para comenzar el anuncio del camino cuaresmal. Al iniciar el Vía Crucis, el Cristo recorrió las cuatro primeras estaciones en solitario, hasta encontrarse con la Virgen. Después, esta se incorporó detrás de Jesús Crucificado para efectuar el resto del recorrido. Al llegar al final, y antes de abandonar la catedral, se cantó la Salve popular.

El Vía Crucis anuncio del camino cuaresmal se celebra por sexto año. La lectura del enunciado de cada estación corrió a cargo de Rosario Diez,  vocal de Liturgia y Cultos del Cristo de la Misericordia;  la de los textos bíblicos de Mercedes Zamorano; el inicio y cierre del Vía Crucis así como la  lectura de las oraciones a cada estación lo hizo el consiliario de la Hermandad de Cofradías, Dionisio Antolín. De la lectura de los comentarios a cada estación se encargaron vocales de Juventud y grupos de jóvenes