Desde la sección sindical de UGT de las escuelas infantiles Cres Sanz y Casilda Ordoñez quieren hacer pública su queja por las «continuas irregularidades y tardanzas» en el cobro de salario de las trabajadoras, así como anunciar su intención de tomar medidas de presión al inicio del curso si la situación no se resuelve.
«La empresa que gestiona estos centros, Colorín sin Fin, está retrasando reiteradamente el ingreso de las nóminas más allá de lo estipulado en convenio, llegando a demorar los pagos por más de dos meses», asegura UGT al tiempo que recuerda que las escuelas infantiles son propiedad del Ayuntamiento y que este aporta unas cantidades económicas todos los meses para su funcionamiento, por lo que la responsabilidad es, en parte, suya.
Desde la sección sindical hacen llegar su «preocupación» y acusan al Consistorio de ser «poco diligente».