Iglesia de San Martín Obispo, Salcedillo

F. de Lózar y J.L. Estalayo
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Todos coinciden en alabar la magnífica portada románica de medio punto, compuesta por tres arquivoltas, que descansan sobre capiteles decorados, sin duda, el elemento más destacado de este templo de la localidad norteña de Salcedillo.

Iglesia de San Martín Obispo, Salcedillo - Foto: Jose Luis Estalayo

En el centro de Salcedillo, junto al puente sobre el Camesa se localiza la parroquia de San Martín Obispo, cuya nave algunos analistas consideran románica como su cabecera. Para el maestro García Guinea sólo serían románicos el ábside y la portada. El templo original se levantaría en el siglo XII y sería en el XVII-XVIII cuando se añadieran la torre y la sacristía.

Como ya hemos visto en otros templos, la intervención de Románico Norte -que explicó in situ a los vecinos en qué consistirían las obras de reparación- se centró en la renovación de la cubierta y en una actuación sobre los muros de su interior, con el fin de solucionar los problemas de humedad que sufría. 

Magnífica portada

Todos coinciden en alabar la magnífica portada románica de medio punto, compuesta por tres arquivoltas, que descansan sobre capiteles decorados, sin duda, el elemento más destacado de este templo de la localidad norteña de Salcedillo.

La mirada

Todavía son visibles, tanto en este muro norte de la nave como en el del lado sur, una serie de canecillos que no hemos de catalogar como medievales, sino como modernos pues presentan la misma talla que los actualmente existentes en la iglesia de Barruelo de Santullán y fueron obra de los mismos canteros que trabajaron en la restauración de estos edificios en la década de 1940. 

Otro tanto ocurre con la ornamentación de dientes de sierra que decora las cornisas. Tan sólo los canecillos del exterior del ábside podemos considerarlos originales. 

AMMT - Románico digital

Cuaderno de anotaciones

Localidad: Salcedillo

Ayuntamiento: Brañosera

La iglesia fue consagrada el 11 de febrero del año 1118.

Salcedillo perteneció al monasterio de Santa María la Real de Aguilar de Campoo y a su alfoz, tal y como consta en un privilegio de Alfonso X.