Entre la urbe y lo rural

Ana Lucas
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Amante de la fotografía y experto en materia audiovisual, Sergio Rodríguez comparte con nosotros sus diez lugares favoritos con los lectores de DP

Entre la urbe y lo rural

1.El pantano de Aguilar de Campoo.  «Me parece espectacular y quien vive en Aguilar no es consciente del paraíso del que disponen. Cada vez que voy allí me quedo impresionado de las vistas. Hay tantos rincones increíbles que me faltan dedos para contarlos. Para mí este pantano es un sitio especial, las puestas de sol que se ven, el mirador desde los pilares, el bañito en la playa del pantano o la hamburguesa casera que te puedes comer en el Viarce al anochecer disfrutando de la música que ponen a esas horas. Desde que soy un crío he ido allí y ahora vivo y siento la misma felicidad que antes, yendo con mis amigos o mi pareja».


2.Mirador de Piedrasluengas. «Este es mi sitio favorito de toda la Montaña Palentina, las increíbles vistas a los picos de Europa, la casa abandonada que hay unos metros más abajo, la plena naturaleza… en cualquier estación del año es espectacular, un lugar para pararse a pensar sobre la inmensidad de lo bonita que es nuestra tierra».


3.Estalaya.  «Estalaya es un pueblo muy pequeño y poco conocido de la provincia, pero del que es originaria parte de mi familia. Mis padres tienen un pequeño terreno allí y voy cada vez que paso por la zona, es un sitio único que para mí significa tranquilidad, relajación y desconexión. Estalaya tiene un alto al lado de la iglesia del pueblo en el que hay mesas para sentarse a comer, las vistas desde allí son espectaculares y se respira absoluta tranquilidad. Siempre que voy me tumbo encima de una de las mesas y me quedo dormido. Por no hablar del Roblón de Estalaya, una ruta espectacular hasta este gran abuelo de 800 años, cruzando todo un robledal. En otoño es un espectáculo de color».


4.La Ruta de los Pantanos.  «He perdido la cuenta de cuántas veces la he hecho, sé que es algo muy general pero siempre que viene algún amigo de fuera de Palencia o alguien de la ciudad que no conoce el norte, es el comodín que uso para que pueda apreciar la belleza del norte provincial. Creo que no hay palabras suficientes para describir esta ruta y los paisajes y lugares que la componen. Pantanos, bosques, pueblos de montaña… Es increíble».


5.Carretera hacia Cardaño de Arriba. «Una carretera, recta, estrecha y totalmente de montaña, a los pies del Espigüete. Es mi trayecto favorito sin duda cuando hago la ruta de los pantanos. Nubes en lo alto de la cumbre, fauna visible… y una cervecita y un pincho de tortilla en el garito de Jonathan al inicio de la carretera marcan la diferencia del comienzo de esta ruta».


6.Pinar de Velilla del Rio Carrión.  «Es un sitio que para mí significa comienzo, está al principio de la ruta de los pantanos comenzando por Velilla. Tengo una gran pasión por los bosques, me encantan. Y este comienzo para mí es único ya que durante la ruta cambia drásticamente el paisaje. Llegar al pinar de Velilla es sinónimo de comenzar una nueva aventura, el bosque formado por esos altísimos pinos parece sacado de un paisaje de Alaska».


7.Gigondo.  «Creo que este lugar no es muy conocido en Palencia y desde que era pequeño mi tío y mi padre me llevaban a pasear por allí con los perros. Es un lugar que recuerdo de desconexión, de felicidad y diversión. Los colores allí en primavera y otoño son espectaculares y tiene una zona en el que el bosque parece sacado de un cuento. He usado esta ubicación para rodar un vídeo promocional allí».


8.Monte El Viejo.  «Un lugar para ir con tus amigos, tus familiares y allegados a pasar una bonita tarde en la naturaleza, ver el atardecer y contemplar la ciudad de Palencia desde lo más alto. Unas cervezas con tus colegas, subir a comer las patatas de La Mejillonera que has comprado para llevar con tu pareja, una ruta en bici… Han marcado muchos momentos en mi vida».


9.Tierra de Campos.  «Me he enamorado de esta comarca, el Mar de Campos diferencia a Palencia del resto de provincias de España. Nunca he visto mejores atardeceres en mi vida, ni en Noruega, ni en Londres, ni en el mismo desierto del Sahara. Un sol después de una tormenta es capaz de asomar por debajo de las nubes negras tiñiendo todo el cielo de colores morados y naranjas mientras las espigas de los campos se mueven con el viento… Es como estar en una fotografía de Google».


10.Casas en el árbol en Brañosera.   «Sí, hay unas casas construidas en los árboles cerca de Brañosera, y no voy a decir su ubicación. Son la ilusión de un buen hombre, que las ha construido a mano en medio de uno de los bosques de alrededor de Brañosera, están llenas de libros los cuales puedes coger y leer mientras te sientas en uno de sus butacones».