Un año más, la ciudad se traslada al Medievo. Cantos, teatro, música y puestos de época fusionados para crear un ambiente único en el parque del Sotillo. Un total de 130 puestos divididos entre artesanía, alimentación y restauración, que permanecerán abiertos hasta el día 2 de septiembre.

El mercado arrancó con la visita de las autoridades y organizadores: al alcalde, Alfonso Polanco; el concejal de fiestas, Sergio Lozano; y el gerente de Claxxon Producciones, Miguel Herrero, entre otros.

Para inaugurar esta feria, los asistentes pudieron disfrutar de un espectáculo teatral, con músicos, danza del vientre y cetrería, mientras que un bufón fue el encargado de dar el pistoletazo de salida al grito de «disfruten el presente con mucho esmero».

Los encargados de los puestos esperan que la gente se acerque a visitarlos y que la feria termine siendo un éxito. Nadia, una vendedora de bisutería, explica el sacrificio de los feriantes: «pasamos mucho tiempo fuera de casa sin ver a nuestra familia y amigos, pero compensa porque nos gusta lo que hacemos» aseguró.

Diana, también responsable de un puesto de bisutería, cuenta la grata sorpresa que se llevó al conocer la capital tras el último mercado medieval al que asistió hace unos meses. «Es una ciudad muy tranquila, nos da mucha seguridad venir aquí porque apenas hay delincuencia y el público es muy agradecido» explica. Durante el frío invierno, la mayoría del colectivo se dedica a la elaboración de sus artículos, además de a la venta en casetas por Navidad. La economía en este sector «no está en sus mejores días», asegura Diana.

Por primera vez, el mercado se ubica en fin de semana, dando respuesta a las peticiones de los palentinos para poder disfrutar de uno de los principales reclamos de los sanantolines. La duración de la muestra, como ya se hizo el año pasado, se amplía un día más pasando de dos a tres días.

En esta edición se han introducido paneles informativos con toda la información del mercado, incluyendo un plano con la distribución por zonas y horarios de las actividades. Asimismo, la edición de 500 carteles y 5.000 trípticos y la difusión en redes sociales son la herramienta principal de información este año.

En cuanto a los espectáculos, habrá de todo y para todos los públicos: estáticos, itinerantes, para el público infantil, para el familiar, de fuego, pirotecnia, música medieval y árabe, cuentacuentos, teatro de guiñoles, circo, una exposición de cetrería, una caravana de burros y atracciones infantiles. Todo ello hasta superar el centenar de actividades.

El mercado es una visita casi obligada para los palentinos, que  no dudan en acudir para comprar entre la variedad de artículos disponibles. María Antonia y José Luis lo recorren todos los años y, a medio paseo, ya tenían bolsas de algunos de los puestos. «Mi parte favorita es la joyería, siempre traen cosas variadas y de calidad», afirmó María Antonia. José Luis se decanta por los artículos de magia.

Al final del parque está ubicada la zona de restauración, que solo con el olor atrae a la clientela. Este año, hasta los paladares más exigentes tendrán cabida, puesto que la diversidad abarca desde una brasería o una taberna alemana hasta crepes y gofres para los más golosos. El mercado permanecerá abierto hasta mañana, de 12 a 22 horas.