La Yutera cumple 20 años con un salto a la biomasa

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Se instalará un potente sistema de regulación, control y telegestión que permitirá un seguimiento detallado de toda la instalación para que funcione con óptimo rendimiento

La Yutera cumple 20 años con un salto a la biomasa - Foto: Sara Muniosguren

En unos días, el 15 de octubre, se cumple el vigésimo aniversario del inicio de la clases, y en unos meses, en mayo del próximo año, de la inauguración del campus palentino de la Universidad de Valladolid, Uva, una efemérides que, según los plazos, coincidirá con la finalización de una obra de envergadura tal es la red de calor con biomasa, con una  inversión de 1.164.290,97 euros. La Yutera agrupa la Escuela Técnica Superior de de Ingenierías Agrarias (Etsiiaa), el Vicerrectorado, los edificio E y D y el Aulario, edificios que en la actualidad cuentan con calderas de combustibles fósiles, gasóleo y gas y tienen un consumo medio de 2.677.540 kWh brutos/año. Con el fin de optimizar el consumo de energía para calefacción de estos centros, además de tener un menor gasto en combustible y de reducir las emisiones de CO2 al medio ambiente, la UVa encargó a la empresa pública Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl), la ejecución y gestión de una central de calor a biomasa junto con una red de distribución de calor. El combustible elegido para la central es astilla forestal, de tamaño máximo G100, con una humedad entre el 20% y el 50%, que permitirá optimizar los ahorros económicos y aprovechar mejor los recursos forestales de nuestra comunidad.

   Las obras, que fueron adjudicadas por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, a través de la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente (Somacyl), a la empresa Veolia Servicios Lecam, SAU, consisten, básicamente, en una sala de calderas de nueva planta y estructura dotada de instalaciones hidráulica y eléctrica, tendido de tuberías de calefacción y control en zanja o de forma aérea hasta las actuales salas de calderas de los cinco edificios a conectar a la red y la realización de una subestación de intercambio de calor en cada uno de los edificios para entrega de calor a las actuales instalaciones térmicas. 

   La instalación proyectada (caldera y equipos hidráulicos) y el silo de combustible se construyen en una nueva edificación, ubicada en la parte trasera de la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias. Se instalará una caldera de biomasa para astilla forestal de 1650 kW de potencia, con un depósito de inercia de 30.000 litros que, junto con el volumen de agua contenido en la red de canalizaciones de distribución, será capaz de proporcionar una potencia térmica suficiente para cubrir la demanda de los centros.

La caldera estará también equipada con un electrofiltro de última tecnología, para reducir al máximo las partículas volátiles. Se trata de un equipo de filtración avanzada cuya finalidad es retener las partículas de menor tamaño contenidas en los humos.

   Desde la central de biomasa, se construirán las redes de distribución de energía térmica, (en forma de agua caliente a 90 ºC), que conectarán la central, con las salas de calderas de los edificios del campus.  La red de distribución, se realizarán mediante tuberías de acero preaislado, colocadas enterradas en el terreno.

En cada uno de los edificios, para realizar el aporte térmico necesario, se instalará una subestación de transferencia térmica.

    El consumo energético de cada edificio se registrará y medirá mediante un contador de energía, que servirá asimismo para conocer la energía que se consume en cada uno de los centros que se conectarán a la central.

   Para toda la instalación energética se instalará un potente sistema de regulación, control y telegestión, que permitirá realizar un seguimiento detallado de toda la instalación para que funcione con óptimo rendimiento y que también generará avisos automáticos en caso de incidencias con objeto de disminuir los tiempos de respuesta.

   Este proyecto permitirá potenciar el uso de la biomasa forestal con fines energéticos, como recurso local, sostenible y con nula emisión de gases de efecto invernadero que, a la vez, disminuye la dependencia energética de la región de los combustibles fósiles; modernizar las instalaciones de calefacción y ACS de los edificios del campus, renovando todos los equipos de generación de  energía térmica, no teniéndose que invertir en nuevas calderas en ningún edificio durante más de 25 años; mejorar la eficiencia energética de todas las instalaciones térmicas de los edificios de La Yutera, al utilizarse una caldera de biomasa de alta tecnología que funcionará de forma mucho más continua, mejorando el rendimiento energético de las instalaciones actuales; reducir los coste de mantenimiento preventivo y correctivo; disponer de un moderno sistema de control y telegestión de energía térmica en los edificios del campus, lo cual permitirá reducir los consumos de energía y mejorar el confort térmico de los usuarios.

Dado que existe una sala de calderas a gas natural próxima a la nueva a biomasa, se conservará para ser utilizada como suministro de socorro en caso de fallo del sistema de calor a biomasa. Las instalaciones a gasóleo existentes se van a desmantelar, mientras que las de gas natural, en general, se dejan en funcionamiento manual, para un posible uso futuro.

  La vicerrectora de La Yutera, Amalia Rodríguez, señala que «tenemos el campus levando, con las molestias que ocasiona, pero es una obra muy importante porque necesitábamos esa caldera de biomasa desde hace bastante tiempo», y añade que la aportación de la Universidad de Valladolid se traduce en costes fijos de consumo y variables de amortización de obras. Asimismo, avanza la intención de actuar en el edificio de Agrarias, y es que «el proyecto está ya terminado». Así, «se va a poner una envolvente para mejorar la eficiencia energética y se cambiarán todas las ventanas». Entre los proyectos en este capítulo de infraestructuras, la vicerrectora hace referencia a un nuevo edificio polivalente, que permitiera ampliar el espacio en aulas e investigación. 

INVESTIGACIÓN. En este capítulo de obras, señalar que también se han mejorado las instalaciones y el servicio que se ofrece a los investigadores, y es que en La Yutera se realiza investigación de primer nivel y atender sus requerimientos es imprescindible para que continúen  con su tarea, que redunda finalmente en beneficio de todos. Así,  se ha dotado a los laboratorios de la infraestructura eléctrica precisa para poder conectar los frigoríficos, congeladores y resto de equipamiento a una red específica alimentada desde el grupo electrógeno instalado en el edificio D, de forma que cuando exista un corte de suministro eléctrico general en el campus (programado o fortuito), tras un breve espacio de tiempo (inferior a cinco minutos) el grupo electrógeno arranque y alimente eléctricamente los equipos a los que esté conectado. De esta forma, como explican desde La Yutera,  se evitarán incidentes como la pérdida de muestras y resultados de las investigaciones llevadas a cabo por los diferentes departamentos. La mayor parte de los edificios del campus no cuenta con esta infraestructura o es claramente insuficiente, por lo que era «necesario dotarlos de unas instalaciones eléctricas generales de grupo suficientemente dimensionadas para poder alimentar todo el equipamiento existente actualmente en los edificios, incluyendo cierto margen de seguridad para contemplar los futuros equipos», justifican desde el campus.