Palencia no ha podido ver a ese nuevo Morante. ¿Qué ha sucedido?

El primer toro fue muy incierto, no estaba fijo en los engaños, con la vista muy repartida y deslucido en su comportamiento. Al arrancar salía con la cara alta, se distraía, se ponía a escarbar. Pienso que fue un animal con muy pocas luces. En cuanto al nuevo Morante, creo que soy el de siempre, con un mayor rendimiento, contento por el deber cumplido, aunque quizá esté un poco cansado ya que son muchas corridas las que llevo.

En el segundo toro, el público se enfadó con usted. ¿Tenía razón en hacerlo?

El segundo del lote también fue un astado que se ha pasado todo el tiempo que estuvo en el coso sin dejar de escarbar un momento y así resulta muy complicado, por no decir imposible, poderte pelear con él. Como suele decirse, dos no pelean si uno no quiere, y en este caso el único que no quiso pelea fue el toro.

Quizá se pudo hacer algo más

El animal no ha querido pelea en ningún momento, iba siempre escarbando y a base de arreones. Y hay veces que lo mejor que puedes hacer es abreviar como hice yo.