Flauta ganadora

A. Benito
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Natural de Valladolid, pero estudiante en el Conservatorio de Palencia, Diego Pajares se ha convertido en el ganador del XIX Certamen Nacional de Interpretación Intercentros Melómano

Flauta ganadora

Es vallisoletano, pero ha estudiado siempre en el Conservatorio de Palencia, donde su padre es profesor de Historia de la Música. Empezó a tocar la flauta travesera con 8 años y ahora, con 17, se ha convertido en el ganador del XIX Certamen Nacional de Interpretación Intercentros Melómano, una iniciativa de la FundaciónOrfeo creada en 2002 con el objetivo de fomentar la participación activa de los alumnos de los conservatorios de música en concursos de carácter profesional. 

La Sonatina para Flauta y Piano, de Henri Dutilleux, fue la obra que le dio el pase en la fase autonómica para la semifinal, que se celebró hace unos días en Alicante. «El día anterior no dormí nada. Antes de actuar me puse bastante nervioso y cuando salí al escenario no me quedó más remedio que poner el piloto automático», explica el joven. La Fantasía Pastoral Húngara, de Albert Franz Doppler, fue la obra escogida en esta ocasión por Pajares, que junto a otros tres músicos fue seleccionado entre dieciséis para participar esa misma tarde en la final del concurso.

«A pesar de la paliza que llevaba encima, interpreté la Hamburguer Sonata, de Carl Philipp Emanuel Bach, y la Sonatina de Dutilleux con tranquilidad y confianza en mi mismo», asegura al tiempo que ensalza la inestimable ayuda de su pianista acompañante, Marina García Vélez. Y es que la joven se preparó las obras en un mes y, además, actuó como «psicóloga y coach» del flautista vallisoletano formado en Palencia, que el año pasado quedó segundo en una edición en la que se impuso el saxofonista palentino Ginés Pérez.

«Con la primera obra tuve un pequeño fallo, durante cuatro segundos lo pasé fatal, pero supe cómo reaccionar y demostré todo lo que he trabajado estos años. En cuanto a la segunda, el sonido fue espectacular; recuerdo los aplausos del público al terminar», explica emocionado el joven. «El premio consiste en una gira de conciertos por España, una entrevista en Radio Nacional Clásica, un seguro para flauta y un diploma», concreta al tiempo que confiesa que, gracias al reconocimiento, verá cumplido su sueño de actuar como solista en el Auditorio Nacional de Madrid».

Pajares aprovecha la ocasión para agradecer las enseñanzas de la que durante varios años fue su profesora de flauta, Alicia Garrudo. «Se lo debo todo a ella», afirma, y asegura que «con trabajo y ganas todo el mundo puede llegar adonde quiera». De hecho, el flamante campeón reconoce que al principio no tenía mucho interés por la flauta y que a pesar de su talento y aptitudes, apenas ensayaba, «quizá por los prejuicios en torno a la música clásica». Todo cambió a partir de 4º de Profesional. «Acudí a varios cursos y campamentos que me hicieron descubrir que me gustaba tocar la flauta», apunta finalmente el músico, que de esta forma quiere animar a otros jóvenes intérpretes a buscar su propia motivación.