Gestos para mermar la huella de carbono

DP
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La Diputación elabora una guía básica para el uso de la red de redes

Gestos para mermar la huella de carbono - Foto: David Castro

La Diputación apuesta por pequeños gestos para disminuir la huella de carbono en el uso de la red de redes, por lo que elaborado una guía básica para sus empleados que ha  abierto a  todos los ciudadanos de la provincia. Se trata de un documentos que tiene como finalidad ayudar a entender este mundo de las nuevas tecnologías, en el que aporta datos sobre el impacto que supone su uso y, sobre todo, y más importante, ofrece consejos útiles sobre su utilización que ayuden a tomar las decisiones correctas. Por ejemplo, solo el envío de un correo electrónico emite 4 gr de CO2 a la atmósfera, y 50 si se hace con un archivo adjunto muy pesado. Si en todo el mundo se mandan una media de 12.240 correos a la hora, al año se emite el equivalente a las expulsiones de CO2 de 890 millones de coches.

 Con esta guía, la Diputación no pretende renunciar a las nuevas tecnologías, ni mucho menos; se trata -como explica- de que los ciudadanos conozcan las repercusiones que tiene su uso, y en consecuencia reducir la huella de carbono al máximo, y con ello mejorar el impacto positivo que tiene el uso de la red. Se trata de ayudar en la toma de decisiones, siendo conscientes de lo que implica en los aspectos de tiempo personal y de implicación ambiental un uso inadecuado. 

Por ello, la institución provincial propone algunos consejos, los cuales están dirigidos al ahorro energético y al ahorro de valioso tiempo. Estos se resumen en hacer limpieza de archivos sin utilidad del correo y dispositivos (si cada castellano-leonés borrara cinco correos al día se podrían encender todas las catedrales de la región todas las noches durante un año);  transitar y carga la red solo lo necesario (no enviar correos inútiles, es decir que no lleven información significativa, tales como los correos de cortesía con respuesta Ok, o gracias, saludo o ¡nos  vemos!...?) y utilizar en tiempo en la red con eficacia e inteligencia (contabilizar el tiempo  dedicado a las redes sociales e internet y actuar en consecuencia).

Todos estos consejos y buenas prácticas que realiza la institución provincial están en consonancia con el compromiso con la Agenda 2030 y los ODS, en concreto con la meta 3 del objetivo 13 de Acción por el clima: 13.3 Mejorar la educación, la sensibilización y la capacidad humana e institucional respecto de la mitigación del cambio climático, la adaptación a él, la reducción de sus efectos y la alerta temprana.

Los elementos tecnológicos y redes sociales que se utilizan (téfonos inteligentes  tablets, correo electrónico, la nube, WhatsApp, Facebook, Twitter…) parece que son inocuos, que no suponen ningún impacto sobre el medio ambiente; incluso que la nube es algo totalmente virtual y que su uso no implica ningún coste ambiental. Pues realmente no es así.

La huella de carbono o el impacto sobre el medio ambiente por el uso de las nuevas tecnologías se deben fundamentalmente al consumo energético necesario para su funcionamiento, pero también al consumo de recursos de todo tipo en todo su ciclo de vida. Es decir, desde la fase de fabricación de equipos, cables y dispositivos, hasta su gestión como residuos. Por el uso de Internet se envía a la atmósfera 850 millones de toneladas de CO2 al año, que representan el 4% de las emisiones totales.