El crecimiento de los delitos contra la libertad e indemnidad sexual durante el segundo trimestre de 2021, que se situó en el 38,6, hasta los 244, encabeza el repunte de la tasa de la criminalidad en Castilla y León en lo seis primeros meses del año, que se situó en el 18,5 por ciento, con 33.417, frente a los 28.205 del mismo periodo del pasado año.

A nivel nacional, según el informe del Ministerio del Interior al que ha tenido acceso Ical, el incremento de las infracciones penales fue del 11,7 por ciento, hasta las 898.516, mientras que los delitos contra la libertad sexual también fueron los que más subieron, con un alza del 32,8 por ciento.

Simultáneamente, en la primera mitad de este año, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado firmaron un récord en esclarecimiento de delitos en la Comunidad desde 2010.

Así, según los datos recabados por el Ministerio del Interior con respecto a las intervenciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, las infracciones penales por cada mil habitantes en la Comunidad Autónoma pasan de 27,2 a 29,3 en los últimos doce meses, si bien continúan claramente por debajo de la media nacional (39,2) y también por debajo de las tasas de criminalidad de Castilla y León en la última década.

Sólo a consecuencia de la pandemia y el confinamiento, la Comunidad se situó en un índice inferior al actual, aunque, en todo caso, permanece entre las cinco más seguras del país, por detrás de Extremadura, Asturias, La Rioja y Aragón, comunidad esta última que registra 29,2 delitos por cada mil habitantes, es decir, prácticamente la misma tasa.

De acuerdo al informe emitido por la Secretaría de Estado de Seguridad, crecen los índices en todas las provincias de Castilla y León, pero de manera muy leve, de forma que todas ellas se mantienen por debajo de los 3 delitos más por cada mil habitantes, excepto Valladolid, que crece en 3,1 delitos en este periodo.

Por detrás de Valladolid, el crecimiento de la tasa lo encabezan Ávila, con 2,6 delitos más, Burgos, con 2,5, Soria, con 2,1, y Zamora y Palencia con 2. Por debajo de dos delitos más por cada mil habitantes que los doce meses anteriores se encuentran Salamanca y Segovia, con 1,6, y León, con 1,4.

En cifras absolutas, el mayor incremento se registró en Valladolid con un 24,4 por ciento, hasta los 8.125 infracciones, por delante de Ávila, con un 21,7 por ciento (2.331); Burgos, con un 20,2 por ciento (5.315), y Palencia, con un 19,2 por ciento (1.952). La menor subida se registró en León, con un 12,3 por ciento (6.108), por delante de Segovia, con un 13,7 por ciento (1.969); Salamanca, un 15 por ciento (4.217); Zamora, con un 18,6 por ciento (2.132) y Soria, con un 19 por ciento (1.177).

En cuanto a las capitales de provincias, Palencia lideró la subida con un 32.2 por ciento (1.028), por delante de Segovia, con un 26,4 por ciento (680); Burgos, con un 24,3 por ciento (2.538) y Ávila, con un 23,1 por ciento (672). En el extremo opuesto se situó Soria, con una subida del 6,9 por ciento (586), seguida de León, con un 13,1 por ciento (2.093); Salamanca, con un 15,1 por ciento (2.251); Zamora, con un 17,5 por ciento (848) y Valladolid con un 20,7 por ciento (4,625).

En los datos acumulados de enero a junio de 2021, comparados con los seis primeros meses de 2020, lideran el incremento de criminalidad los índices de los delitos contra la libertad e indemnidad sexual, incluidos las agresiones sexuales con penetración y el resto de agresiones, que varían al alza un 38,6 por ciento, pasando de 176 a 244.

De igual forma, los malos tratos en el ámbito familiar se incrementan un 28,7 por ciento, -de 230 en 2020 a 296 en 2021-. Crecen también los delitos relacionados con tráfico de drogas, un 29,8 por ciento, -de 178 a 231-, los robos con violencia e intimidación, especialmente en domicilios y establecimientos, un 25,2 por ciento, -de 222 a 278-, sustracciones de vehículos, hurtos, y lesiones y riñas tumultuarias. Descienden, en cambio, los homicidios y asesinatos, (un 16,7 por ciento), y en el mismo porcentaje, las tentativas.

Trabajo policial

Junto a este repunte de los datos de delincuencia, destacan el fuerte incremento del porcentaje de infracciones penales esclarecidas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y la tasa de detenidos e investigados en estos seis primeros meses de 2021, lo que pone de relieve el exitoso trabajo de Policía Nacional y Guardia Civil en lo que llevamos de año.

Así, en la primera mitad de este año, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado consiguen sus mejores datos en esclarecimiento de delitos en la región desde 2010, un 43,4 por ciento, y la mejor tasa de detenidos e investigados por cada 1.000 infracciones penales, 242, sólo superada de manera muy leve por el dato correspondiente a 2014, que fue de 252.

Precisamente, con respecto a estos índices, cabe reseñar que la Guardia Civil y la Policía resolvieron en la primera mitad de 2021 un total de 230 casos frente a los 141 del mismo periodo de 2020, es decir, un 63,1 por ciento más, porcentaje muy superior al incremento de este tipo de agresiones.